Los Hermanos Riddle | One Shots 🖤🔥

I Don't Share | T.R

Situación: Después de que tú y Tom tienen un intercambio acalorado en clase, él te dice que pasará por tu dormitorio más tarde esa noche para ayudarte con las preguntas que tengas, algo que ha hecho muchas veces antes, pero cuando te atrapa en medio de un momento íntimo, la moderación que había estado manteniendo durante todos esos años finalmente se rompe.

Advertencias:SMUT, Dom!Tom, Sadismo, Conducta posesiva, Conducta tóxica, Sexo duro, Masturbación, Perversión de tamaño (?), Perversión de elogio, Degradación leve, Humillación, Azotes, Castigo sexual, Edging, Burlas, Orgasmo denegado, PIV, Charla sucia.

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-Tom, por favor, por favor -tu voz transmitía una súplica desesperada, un gemido sutil que subrayaba la urgencia no solo por ti, sino por la salvación de tus notas vacilantes-. Solo unas cuantas preguntas... estoy a punto de suplicar.

La mirada de Tom te quemó con un brillo arrogante, una sonrisa burlona jugando en sus labios. -Suplicar es bastante impropio de ti... ¿estás seguro de que te sientes bien?

Empapado en su característica condescendencia, sus palabras fluían con la arrogancia esperada que normalmente exudaba. Luchando contra el impulso de poner los ojos en blanco, optaste por seguirle el juego y complacerlo en su lugar, con la esperanza de que te ayudara.

-La verdad sea dicha, el estrés me está afectando -contraatacaste, combinando su mirada arrogante con una sonrisa irónica-. Creo que tengo fiebre... ¿puedes comprobarlo?

-Usar la enfermedad como una estrategia para llamar la atención, eso es más propio de ti. -La sonrisa burlona de Tom se ensanchó y su mirada adquirió un brillo cómplice, su tono destilaba un dejo de diversión sádica-. Pero bien, si insistes en arrastrarme a tus teatralidades, te seguiré el juego. Ven aquí.

Tu estómago dio un vuelco con una oleada inesperada de emoción, una sensación con la que ahora te habías familiarizado bastante en tus interacciones con Tom. Durante mucho tiempo, lo habías encontrado innegablemente atractivo, su comportamiento reservado solo se sumaba al atractivo. Pero, a pesar de tus juguetones intentos de coquetear, él se mantuvo estoico continuamente, casi siempre respondiendo a tus avances con comentarios sin sentido. Bromear y provocar con él se había convertido en una especie de juego, pero la parte exasperante era que nunca parecía dispuesto a llevarlo más allá.

Mientras rodeabas el escritorio de madera crujiente en el aula de pociones que ahora estaba vacía de sus ocupantes habituales, el aire eléctrico a tu alrededor vibraba con anticipación. Era un baile familiar entre ustedes dos, un coqueteo que bordeaba algo más, un tira y afloja constante que mantenía la dinámica vigorizante.

Cuando te posicionaste a su lado, inclinándote casualmente contra el escritorio con un estilo deliberado para el efecto dramático, Tom resopló en respuesta. La lucha por contener una sonrisa divertida se dibujó en sus labios afelpados mientras sus ojos oscuros escaneaban tu rostro con una precisión estoica, emociones meticulosamente guardadas como siempre.

Entonces, algo cambió.

La actitud de Tom cambió sutilmente, una seriedad se apoderó de su expresión mientras acortaba la distancia. Una de sus grandes manos ahuecó la parte posterior de tu cabeza, sujetándote firme, mientras que la parte posterior de la otra presionaba suavemente contra tu frente. La habitación pareció encogerse, tu pulso se aceleró en respuesta al nuevo toque íntimo. Tu mirada permaneció fija en la suya, ninguno de los dos se atrevió a parpadear.

"Hm", los ojos oscuros de Tom parpadearon momentáneamente hacia tus labios, una intensidad sutil en su mirada. Su voz, cargada de matices roncos, acarició el aire mientras comentaba: "Pareces estar un poco caliente".