Il Mistero Dell'Amore • Hyunlix

Ramé

El viento suave acariciaba su rostro, los ojos puestos en el pequeño niño que retozaba con sus carros de juguete llenos de arena junto a su abuela y de nuevo llega esa frase tan incomoda "El dolor de una madre al perder a su hijo"

Sola las personas más cercanas lo sabían, Jisung, Hyunjin e irrecusablemente James. Ninguna de estas personas tenía idea del dolor y la soledad tan despreciable que conservaba en su interior, ese hijo no nacido que tanto ansiaba tener en sus brazos, la emoción y la felicidad que había recorrido su cuerpo como electricidad, una alegría indescriptible de formar su propia familia porque no importaba si su esposo lo odiaba puesto que él iba a tener un amor, a alguien que cuidar y poderlo llamar suyo y aunque no fuera de forma romántica el no necesitaría nada más que el amor de su hijo y su hijo tendría una persona que lo amaría sin importar que

Un amor tan grande que se desvaneció en solo una noche, un momento, en unos segundos, solo eso basto para arrebatar las ganas de seguir, en tan solo unos segundos la vida de cualquiera puede pasar de un extremo a otro y ni él ni nadie puede cambiarlo

Y detrás de sepultar a su primer y único fruto fue cuando comprendió que no puede culpar a James por todo «Como puedo culpar al viento del desorden que vino hacer, si fui yo quien abrió la ventana» - Mario Benedetti

Y es que ¿Qué tenía que pasar para quitarse esa venda de los ojos? Para dejar de soñar que va a ser feliz con un hombre que no lo ama y que por más que se entregue nunca lo vera con cariño

Y por más que duela se debe aprender a vivir con ello porque todo tiene un final asi como las cosas bonitas se terminan las triste también finalizarán, habrá un momento en el cual ese desconsuelo se transforma y se convierte en aprendizaje

— Cuando traigas a otro chico avísame, que vergüenza pase con Hyunjin – volteo hacia su madre la cual no había notado a su lado y volviendo a la vista a su sobrino tomo un bocado de aire — ¿Qué paso con James?

— Creo que simplemente no funciono – levanto sus hombros como si estuviera conteniendo aire y después de un suspiro los bajo junto con su cabeza mirando hacia sus manos — Al principio pensé que era yo el problema, pero ahora no lo creo. Estar con Hyunjin me hizo ver que el problema no soy yo, ni nadie, solo no era para mí y estoy bien con eso.

— Ven acá – su madre lo recibió en brazos, reposo su oído en su pecho, oyó el murmullo de cada latido en su sinfonía constante e insondable — Hijo mío – con solo dos palabras su pecho se estrujo y sus ojos se llenaron como una laguna

— Tenía miedo de que me rompieran el corazón otra vez. A veces puedes confiar en una persona y luego cuando las cosas están mal se olvidan de ti, tengo miedo de que, si confió en él, me rompa el corazón

— Necesitas reflexionar y no tenerle miedo al fracaso , no huirles a las oportunidades por pensar que te puedes equivocar, hijo – hizo una pequeña pausa — Eso es parte del camino para comenzar y mejorar, estar consiente que todo ser humano se equivoca y cuando uno se equivoca lo vuelve a hacer, pero ahora con mayor asertividad

— Al abuelo no le gustará verme golpea... - su poder terminar la frase el puño de Hyunjin estampó contra el rostro de James, Hyunjin había esperado demasiado tiempo para este momento, desde que eran niños, desde la universidad, desde que se enteró todo lo que hacía en contra de Felix y los golpes que este le daba, tenía una ganas incontrolables de descargar todo porque realmente la causa de todos sus problemas

Porque si desde un inicio Felix hubiera sido suyo todo sería más fácil

Vistazos a sus manos echas un desastre en los nudillos, una botella de suero si tenida con esas mismas manos destrozadas y la sangre seca salpicada en su traje oscuro apenas era notoria por el tiempo que había pasado desde que habían ingresado a una clínica privada

James se encontraba en una camilla reposando mientras su vista iba a la terraza al frente de él

El doctor había explicado que tenía algunas heridas, pero ninguna tan grave como para ser vendado u hospitalizado, por otro lado el peli negro se había desmayado por cansancio y falta de alimento

— ¿Por qué lo haces? — después de horas de estar en silencio por fin Hyunjin lo rompió — No solo hablo del dinero ¿Por qué me odias?

James nunca respondió sólo seguir su mirada fija en la terraza

— Si no quieres hablar, está bien, pero no somos niños, cualquier falta me la tomaré personal ya sea hacia mi empresa o para mi familia

—¿Familia? – pregunto con una sonrisa en el rostro — Tú no tienes familia, recuerda que tú madre está muerta y tu padre desaparecido con más prostitutas como lo fue tu mamá

— Mi abuelo vendrá a cuidarte — se contuvo de querer romperle de nuevo el rostro no solo por no ser el lugar sino por su cuerpo que solo ansiaba descansar — Una cosa mas, deberías cuidar tu boca

...

Encerrado en su oficina llena con humo y olor alcohol, la noche había caído y con ella la mayoría de empleados se habían retiro, sabía que Felix llegaría aproximadamente esa madrugada, pero no quería que lo viera en ese estado. Se sentía destrozado aunque al mismo tiempo sentía impotencia, tanta que no sabia si estaba cayendo en la locura

Lo necesitaba, lo deseaba con locura, quería que estuviera ahora mismo a su lado, anhelaba poderlo tener en sus brazos en ese momento, besarlo y acariciarlo. Poder ver ese bello rostro de ángel sonrojado convirtiéndolo de inocente a sensual

Y justo como si lo hubiera pedido al mismo Dios se abrió en par la puerta

Tres perspectivas completamente diferentes

Hyunjin completamente de negro, sus mangas arremangadas hasta los codos, cada mano ocupada con una copa y otra con un cigarro que no dejo de llevar a su boca, su mirada con un ceño fruncido parecían cuchillas que podrían matarte con solo la punta, emanaba un aura que podría poner a cualquiera de rodillas pidiendo piedad sin alguna razón.

Hyunjin solo vio como la secretaria parecía estar temblando ante su mirada y no tenía intención de suavizarla

— Puede irse a casa – hizo una pequeña pausa el rubio sin dejar de mirar al frente suyo – Yo me encargare del presidente Hwang

— Pasen buena noche – Hizo una reverencia hacia Felix y otra a Hyunjin — Con permiso. Y salió de la habitación casi corriendo por el miedo de cómo se encontraba Hyunjin

Y en solo segundos un pelinegro se encontraba de rodillas ante el rubio pecoso abrazando sus piernas y pasando su cara entre sus rodillas "Te amo" palabra repetida al menos unas tres veces

— Felix – tomo las manos pequeñas entre las suyas aun arrodillado — Te amo Felix, te necesito – Lagrimas desbordaban de sus ojos

— Hyunjin cariño, estas ebrio – quitó sus manos tocando el rostro cálido para limpiar con sus pulgares esos ojos cristalizados que lo miraban con amor rogando que se quedara a su lado

— Solo quiero ser tuyo

Ramé: Algo que es caótico y hermoso al mismo tiempo