Alguien me preguntó por qué los atardeceres me llenan de emoción, como si cada ocaso llevara consigo un secreto que sólo yo supiera. Quizás es la forma en que el sol se despide, tiñendo el cielo de tonos cálidos, como un abrazo que se prolonga en el tiempo. En esos momentos, el día se disuelve, y con él, las preocupaciones se desvanecen, dejando espacio a la contemplación.
Cada atardecer es un poema visual, una sinfonía de colores que bailan en el horizonte. Me pierdo en esa paleta de naranjas y violetas, donde la luz se encuentra con la sombra, y en esa fusión encuentro una metáfora de la vida misma. Hay algo profundamente humano en la fragilidad de esos instantes, en la certeza de que todo tiene un final, pero también un nuevo comienzo.
Me emociono porque en cada atardecer hay una promesa: la noche que llega trae consigo la calma, el silencio que invita a la reflexión. Es un momento para recordar lo vivido y soñar con lo que vendrá. En ese instante suspendido, siento que el universo me abraza y me susurra al oído que todo está en su lugar.
Quizás, al fin y al cabo, los atardeceres son un espejo de mi propia alma, una invitación a encontrar belleza en lo efímero, a celebrar cada día como un regalo. Y así, entre luces y sombras, descubro que hay magia en lo simple, en lo cotidiano
Pd: Otro Atardecer Bad Bunny
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Lenguaje Del Alma
PoetrySé que no todos gustarán de este libro , porque buscan otras temáticas como son historias de romance o placer. Pero con esto busco cambiar la monotonía y dejar plasmado en páginas, esos textos profundos que a veces nos llenan de nostalgia y de emoci...