Vida Entre Las Ruinas -Minsung

Capítulo 10 :Nuevos crecimientos y caos

Lunes, 10 de enero de 2025

La casa de Seungmin había cambiado mucho desde que el grupo decidió establecer su refugio allí. La huerta, que una vez fue solo un proyecto en mente, había crecido y florecido gracias al trabajo arduo de Yeosang, Felix y Jisung. Las cajas de madera estaban llenas de hortalizas frescas y hierbas aromáticas que comenzaban a madurar. Los brotes verdes se levantaban con fuerza hacia el sol, y la tierra oscura se había transformado en un pequeño oasis de vida.

Cada día, el grupo se reunía en la huerta para cuidar de las plantas. Felix era el más entusiasta, siempre animando a los demás con su risa contagiosa y consejos sobre cómo cuidar cada especie.

-Mira, Jisung -dijo Felix, señalando un tomate rojo brillante que pendía de una de las plantas-. ¡Estamos haciendo un gran trabajo!

-Es impresionante ver cómo ha crecido todo -respondió Jisung, sonriendo mientras acariciaba las hojas-. Me alegra que estemos todos juntos en esto.

A medida que trabajaban en la huerta, Yeosang se acercó, su vientre comenzando a notarse cada vez más. Su rostro irradiaba felicidad, y a menudo se detenía a descansar, disfrutando del aire fresco y del aroma de las plantas.

-¡Miren lo que he encontrado! -exclamó, levantando un pequeño pepino del suelo-. Este es el primero de muchos.

-¡Qué bien, Yeosang! -dijo Jisung, emocionado. -Pronto tendremos ensaladas frescas todos los días.

-Y es solo el comienzo -agregó Felix-. ¡Vamos a ser unos verdaderos agricultores!

La risa y la alegría llenaban el aire, pero también había una tensión especial. En medio de todo esto, Minho y Jisung se habían acercado más. Las miradas furtivas que compartían estaban cargadas de sentimientos que ambos habían estado guardando.

Una tarde, mientras todos estaban ocupados en la huerta, Jisung decidió que era el momento de hablar. Se encontró con Minho, que estaba regando las plantas.

-Minho, ¿puedes ayudarme un momento? -dijo Jisung, sintiendo que su corazón latía con fuerza.

-Claro, ¿qué necesitas? -respondió Minho, secándose las manos con un trapo y acercándose.

-Quería hablar sobre... sobre nosotros. -Jisung se sintió un poco nervioso, pero decidió seguir adelante-. He estado pensando en lo que hemos pasado juntos. En lo que siento por ti.

Minho lo miró, su expresión volviéndose más seria.

-Yo también he estado pensando en eso. Es complicado, con todo lo que está pasando. Pero no puedo negar que te tengo un cariño especial.

El aire se llenó de tensión, y Jisung dio un paso más cerca.

-A veces, siento que podemos encontrar algo hermoso incluso en este caos -susurró Jisung-. Me haces sentir esperanzado.

Minho respiró hondo, sintiendo que sus corazones latían al unísono. Sin pensar, se inclinó hacia adelante y besó a Jisung suavemente. Fue un beso lleno de ternura y emociones contenidas, un momento que parecía detener el tiempo.

Jisung respondió al beso, cerrando los ojos y dejando que todos sus sentimientos fluyeran. El mundo a su alrededor se desvaneció, y por un momento, solo existían ellos dos.

Cuando finalmente se separaron, ambos sonrieron tímidamente, sintiendo una calidez en su pecho.

-Esto... esto es solo el comienzo, ¿verdad? -preguntó Jisung, su voz temblando ligeramente.

-Sí, definitivamente -respondió Minho, acariciando la mejilla de Jisung-. Estamos juntos en esto.

Al fondo, los demás miembros del grupo los observaron desde la huerta. Hongjoong, Seonghwa, Yeosang, Felix y los demás intercambiaron miradas llenas de orgullo y satisfacción.