Wenned dio indicaciones para que Sarius permaneciera perezosamente en la mansión.
—¿Por qué te vas? ¡Esto es abandono, he decidido ser obediente! ¿No es suficiente?
Sarius lloriqueó, el sutil aroma de su feromona flotaba en el aire impregnando la ropa del alfa celestial.
—Tengo que ir al trabajo, necesito saber en persona cómo se han estado manejando los asuntos y plantear el siguiente proyecto que debemos desarrollar.
¿Por qué le explicaba de todos modos? Wenned sacudió su cabeza y se dispuso a irse mientras la omega parecía querer correr detrás de él.
Parecían una pareja casada con problemas de separación, este pequeño escenario había sido creado por la entusiasta Sarius, el alfa fue consciente de esto y rápidamente trató de evitarla.
—¿No estaba de vacaciones?
El mayordomo escuchó está pregunta mientras el auto se alejaba tras los barrotes del portón principal, sus ojos adquirieron un brillo de molestia y rápidamente explicó:
—El anciano Vincels le pidió que regresara antes, mi señor es un pilar muy importante, si no está todo se podría derrumbar en cualquier momento.
—Entonces luego toda la atención final estará dirigida hacia ese otro alfa bastardo.
Tsk, tsk, era demasiado frustrante.
El mayordomo asintió sintiéndose igual de insatisfecho con todas las injusticias.
—Es así, mi señor ha sido obediente por el bien de la herencia familiar.
Sarius miró al mayordomo muy satisfecha, este hombre era muy leal, recuerda haber escuchado que Gustavo se sacrificó para evitar la caída del villano, aunque sus esfuerzos al final no fueron suficientes.
—¿Qué debo hacer? Me siento muy ociosa.
El mayordomo vio la apariencia fingida de la joven omega y rápidamente se apresuró a preguntar:
—¿La señorita Sarius tiene algo en mente? Puedo hacer los arreglos para usted para que se divierta sin problemas.
¿Algo en mente? En su vida anterior era una asesina muy increíble, pero esta profesión no era demasiado conveniente en este mundo así que solo pudo dirigir sus ojos hacia otro trabajo; los asesinos siempre deben actuar para que sus víctimas confíen plenamente en ellos, de otra manera ¿cómo podrían hacer tan bien su trabajo? Actuar era algo bastante sencillo para ella.
—Sé actuar...
Había un sinnúmero de libros metidos en su cabeza, principalmente los de anatomía humana y farmacología, era esencial para saber en dónde atacar y qué tipo de sustancias eran nocivas en ciertos trabajos.
—Sé sobre anatomía y medicamentos...
Y no olvidar que sabía usar desde armas blancas hasta de alto calibre.
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Ese alfa me pertenece
FantasySarius, una asesina, ha cruzado a un personaje carne de cañón de la novela favorita de su aprendiz "El alfa CEO se convierte en mi marido". En una novela totalmente cliché para adolescentes, Sarius será el factor importante para evitar la destrucci...