Advertencia de cap: Besos subidos de tono🎀
🫀
Había sido un día pesado y mis pies comenzaban a sentirlo luego de varias horas moviéndome de un lado a otro.
Estaba por quejarme conmigo misma cuando la puerta del camerino se abrió sobresaltándome en mi lugar, una melena rubia se asomaba por la puerta metálica.
–– Prepárate para maquillar a Nick–– dijo sonriente.
Nick
El nombre resonó en las paredes de mi mente casi haciéndome sonreír pero me contuve limitándome a asentir rápidamente a Samantha, la estilista del cast.
Yo era la maquillista, junto con otro compañero, nos encargábamos del maquillaje del cast de la nueva serie para Netflix "Monsters: la historia de Lyle y Erik Menéndez", él se encargaba de maquillar a una mitad y yo a la otra incluyendo a Nicholas Alexander Chávez, quién le daba vida a Lyle Menéndez, uno de los hermanos.
Mis pensamientos fueron interrumpidos por el protagonista de ellos, como si de una manifestación se tratase el castaño entró por la puerta cerrándola detrás de él. En su mano derecha llevaba su libreto y en la otra su tercer café helado del día. Típico de él.
–– ¿Otra vez te frotaste la cara?–– pregunté soltando un suspiro, mi mano derecha se encontraba en mi cadera.
–– No soportaba el sudor, tenía que hacerlo–– respondió sentándose en la silla.
–– Es la cuarta vez que te retoco en el día, para eso te he dado los papelitos de arroz, para que los uses y no tengas que arruinar tu maquillaje –– regañé.
Nick rodó los ojos divertido como un adolescente a quien acaban de reprender. Este estiró las piernas en un banco bajito y acolchonado que se encontraba enfrente de él.
–– Para eso estás tú no?, eres mi makeup artist –– mueve su café helado revolviendo el hielo provocando un sonido satisfactorio.
Me limito a asentir sonriendo mientras pongo un poco de agua micelar en un pad de algodón para pasarlo por su cara y quitar los restos de maquillaje y sudor.
–– Nick, necesito espacio. ¿Puedes quitar tus piernas? Necesito pasar de un lado a otro–– di un leve golpecito en su rodilla
El castaño me mira conteniendo una sonrisa mientras encoge sus piernas y las abre.
–– ¿Así está mejor?–– pregunta sin quitar la mirada de mí mientras pone su café y su libreto en el vanity frente a él.
Trago saliva y comienzo a desmaquillar un lado de su rostro con movimientos suaves y circulares.
–– Sí, gracias–– dije a penas en un murmuro.
Mis ojos trataban de concentrarse en mi trabajo de sacar los residuos de suciedad de su rostro mientras sentía como los ojos penetrantes de Nicholas absorbían todas mis facciones haciéndome sentir nerviosa y algo torpe.
Cuando estaba a punto de pasar a su otro lado, al pasar justo enfrente de sus piernas, Nick tomó los costados de mis muslos posicionándome en medio de él haciéndome soltar el pad. Mis manos se sostienen de sus hombros en el intento de no perder el equilibrio.–– Mierda Hannah, ¿puedes dejar de fingir que no pasa nada?–– lo miro apretando mis labios sin saber qué decir.
–– No sé a lo que te refieres–– niego.
Nick me mira unos segundos más con su mandíbula casi pegada a mi pecho. Baja su mirada a mis senos unos segundos y la vuelve a subir a mi rostro.
–– Te extraño –– susurra en un tono suplicante–– no me digas que tú no lo haces –– su agarre es más apretado a mis piernas pegándome más a él. –– no me digas que tú no recuerdas las veces que te hice mía aquí mismo, en este maldito camerino.
Con su cabeza señala hacia algún lado. Muerdo mi labio sintiéndome nerviosa y agitada debido a la cercanía, pero más que eso, por sus palabras.
Nicholas y yo habíamos estado siendo una especie de amigos con derechos los últimos meses. Cuando lo conocí hace más de un año cuando las grabaciones para la serie comenzaron, ambos construimos una bonita relación de amigos, llegamos a ser muy cercanos al punto de comenzar a vernos fuera del trabajo, ya no era solo su "maquillista" sino también su intima amiga. Una vez, lo invité a mí departamento que está a unas cuadras del set aquí en Los Ángeles, preparé una cena, vimos una película y tómalos una copa de vino pero las cosas subieron de tono y cambiaron de dirección.
Nick y yo terminamos en mi cama y al día siguiente casi llegamos tarde al trabajo.
Pero desde hace unas semanas, desde la última vez que estuvimos juntos, he intentado evitarlo. Claro que como verán, ha sido ridículo porque lo veo casi todos los días todo el día. Pero he hecho mi mejor intento al menos de no volver a hablar de lo sucedido o siquiera terminar entre sus sabanas de nuevo. Cosa que ha estado torturando a Nicholas, lo noto siempre que intenta acercarse o tocarme a escondidas pero siempre me logro safar de él de alguna manera.
–– Nick, no hagas esto más difícil por favor –– niego intentando alejarme de él.
Intento fallido.
El castaño me vuelve a halar hacia él y esta vez, sus labios hacen contacto con la piel de mi cuello haciéndome cerrar los ojos y relamer mis labios. Sus labios dejan pequeños y suaves besos en toda la zona pero comienzan a ser desesperados incluyendo a su lengua en el trabajo.
–– Nick, por favor–– suplico.
–– Hannah, por favor–– me imita.
Se aparta solo un poco y jadeo como reclamo. Me mira con un brillo especial en su mirada, como si quisiera decirme mucho pero no lo hace, porque su mirada me lo dice todo.
Lo tomo de las mejillas y me abalanzo a besarlo desesperadamente, el actor no tarda en reaccionar y me aprieta contra él de la cintura. Mis piernas ahora están a sus costados y yo sentada sobre las suyas. Nuestras lenguas vuelven a reencontrarse luego de un par de semanas de estar ausentes una de la otra, nuestros labios juguetean entre sí haciendo notar la necesidad que teníamos el uno por el otro.
Sus manos exploran debajo de mi blusa acariciando la piel de mi cintura delicadamente pero a la vez con desespero lo que me hace jadear sobre sus labios.
–– Carajo Hann, no tienes idea de cuánto extrañe besarte–– dice bajito.
Mis labios se abrieron para hablar pero un sonido fuerte en la puerta me hizo dar un saltito sobre las piernas de Nicholas.
–– ¡Chávez, en 5 minutos vuelves a escena! –– grita Ryan, el director.
Rápidamente me bajo y acomodo mi blusa retomando mi trabajo. Puedo sentir como mis mejillas están calientes debido al momento caluroso de hace unos segundos.
Nick y yo no volvemos a hablar hasta que él sale del camerino con destino al set.
–– Hannah por favor no te vayas rápido, quiero dejarte en casa–– me da un guiño y sale a toda prisa.
Eso fue un "terminaremos en casa lo que comenzamos en el camerino".
Primer shot, ¡que emoción! Espero les guste y pueden hacer sus pedidos. 😽
-Nicky
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ONE SHOTS | NICHOLAS ALEXANDER CHÁVEZ✓
RomanceHistorias románticas cortas en diferentes situaciones con nuestro nuevo "It boy" del momento, Nicholas Alexander Chávez. Pueden hacer sus pedidos.