Mi gran motivo (Arigameplays x tú)

【2】

Me desperté y me departamento estaba hecho un caos, no me sorprendí es algo que siempre pasaba, pero lo que si me preocupó era que Juli se había ido a su casa en ese estado, le envié mensajes para asegurarme que esté bien.

Noté que el dueño del edificio ya me había enviado algunos mensajes diciéndome todas las quejas de los vecinos.

Buenos días señorita, ____.

No sé qué le sucede, pero no es la
primera vez que le advierto que
si sigue haciendo fiestas se irá a
buscar otro lugar.

Estoy cansado de que los vecinos
solo me escriban para quejarse.
Usted es una señorita muy buena,
pero sus amigos son una mala
influencia.

Ahora sí se lo digo en serio, una
sola queja más y se va, gracias.

Esta vez sí estaba siendo algo muy serio, tendría que decirle a mis amigos que busquen otro lugar para hacer sus fiestas.

Iba a cambiarme pero tocaron mi puerta, al inicio pensé que era Juli pero me sorprendí al ver a Abril ahí parada.

—Disculpa, de nuevo no quiero incomodar pero te agradecería un chingo si me podrías dar la contraseña de tu internet solo por unos días.— pidió.— Te puedo pagar.

—Si solo vienes a eso, pierdes tu tiempo, pero puedo pasarte la contraseña del internet del edificio.— comenté.

—Ya me lo dieron pero va demasiado lento porque muchas personas lo usan.— respondió.— Serán unos cuatro días hasta que me pongan a mí el internet, por favor, si quieres te ayudo con todo este desastre.— propuso al ver un poco mi departamento.

—Bien, pero tendrás que pagarme y también ayudarme con el desorden.— dije y aceptó con una linda sonrisa.— ¿Puedes esperar un momento aquí? Voy a cambiarme y a tomar una pastilla.— avisé y asintió.

Hice todas mis necesidades y salí, Abril se encontraba en una llamada, al parecer estaba hablando con su papá así que esperé a que termine para poder salir.

Luego de unos largos minutos por fin colgó su llamada y pude ir a la sala.

Ambas comenzamos a ordenar todo en un silencio incómodo para mí, ni siquiera yo sabía el por qué la trataba un poco mal.

—Oye.— llamó mi atención.— Nosotras no empezamos muy bien que digamos.— recordó mientras barría.— ¿Qué te parece si comenzamos de nuevo?— preguntó.

—No lo veo necesario y tampoco me interesa tener una buena relación contigo, solo vamos a hablar por el internet durante estos cuatro días, después cada una por su lado.— expliqué.

—¿Tu novia no te deja tener amigas o qué?— exclamó y la miré mal.— ¿La chica con la que te vi afuera no es tu novia?

—¿Por qué te importa? Mi vida privada no debería de interesarte.— me quejé.

Ella no respondió nada y siguió limpiando al igual que yo, ahora me estaba arrepintiendo de haberla dejado entrar aquí.

Cuando terminamos le invité unas galletas y una bebida como agradecimiento, como para que no diga que era una mala persona y también le di mi contraseña.

—La neta me salvas la vida.— exclamó.— Gracias a tu internet podré hacer mis streams y subir contenido sin ningún problema.— comentó.

—¿Streams? ¿Qué es eso?— cuestioné.

Abril comenzó a contarme y explicarme todo lo que hacía en las redes, yo sin querer comencé a escucharla atentamente y a admirar su sonrisa cada vez que hablaba de su trabajo, se notaba que le encantaba hacer streams.

Luego de esa pequeña conversación, la acompañe hasta la puerta y por fin se fue. Aún me quedé con la duda de todo, así que la buscaría en esa plataforma que me dijo, no porque ella me interese o quiera verla, sino por la curiosidad.