La música resonaba en el gran salón decorado para el baile que había aquella noche. Las luces brillaban y los estudiantes reían y bailaban, pero Zee no podía disfrutar de la fiesta.
Su mente estaba atrapada en la conversación que había tenido con Nunew semanas atrás. El arrepentimiento lo consumía poco a poco, ya que luego de la conversación con su hermano, se la paso reflexionando sobre sus sentimientos respecto a Nunew.
De forma vergonzosa debía de reconocer que había sido un idiota por no darse cuenta antes de lo que realmente sentía su corazón. Se dio cuenta que incluso estando "enamorado" de Saint, su corazón seguía buscando a quien fue su verdadero dueño.
"A quien fue y seguirá siendo.."
Claro, si es que Nunew lo perdonaba. Ante aquella idea su corazón se acelero mientras buscaba impaciente al menor entre la multitud.
Al encontrarlo, su mirada se iluminó. Nunew parecia estar buscando a alguien, quien seguramente era Nat, pero su hermano ya estaba ocupado bailando con Max en algún lugar de salón.
Zee se armó de valor y empezó a caminar hacia el, sintiendo cómo su corazón latía con fuerza con cada paso que daba. Pero detuvo su caminar cuando noto a otra persona acercarse a Nunew.
/ –Príncipe Nu Kuea, ¿Me concedería esta pieza?
Aquella palabras llamaron la atención del futuro rey que inmediatamente observo hacia donde estaba el castaño, quien estaba por tomar la mano de aquel hombre.
Claramente, eso era algo que no iba a permitir, ni siquiera el estar obligatoriamente comprometido con alguien más.
– Lo siento pero.. /
– ..Pero el me estaba esperando a mi para bailar.
Nunew se giro un poco sorprendido al escucharlo. Ambos se miraron y Zee no pudo evitar mostrar una pequeña sonrisa al pensar que ambos tuvieron el mismo recuerdo.
El extraño hombre tan sólo asintió y se apartó dejándolos a ambos.
—No esperaba verte aquí —menciono Nunew, un tanto nervioso, siendo el primero en decir algo.
—Sé que no hemos hablado en semanas… —Continuó Zee un poco avergonzado, a la vez que extendia su mano hacia el menor- pero concedeme este vals y permíteme disculparme
Nunew observo la mano ajena por unos segundos, unos segundos que para Zee fueron eternos hasta que finalmente fue correspondido.
La sensación de tener sus manos juntas fue algo que ninguno de los dos pudo olvidar desde la primera vez que se tocaron, y ahora, en ese momento, internamente desearon que fuera así por siempre.
Zee guio a ambos hacia la pista de baile, donde estaban la mayoría de los estudiantes. Colocó su mano en la cintura del menor antes de empezar a bailar. Luego tomó una respiración profunda—. Quería… quería disculparme. Lo que dije aquel día fue egoísta.
Nunew lo miro al escucharlo y luego desvío la mirada antes de contestar
— Lo que dijiste fue… fue lo que sentías en ese momento.
—No era lo que realmente sentía, solo estaba confundido, perdido por darme cuenta de todo de una vez — Zee se movía suavemente junto a Nunew por la pista de baile mientras seguía hablando— Luego fue Nat quien me abrió los ojos e hizo que me diera cuenta de que siempre me he sentido atraído hacia ti. Pensé en lo que siento cuando estoy cerca de ti, en los momentos que hemos compartido. Incluso cuando estaba con Saint. He estado corriendo de mis sentimientos, de mi pasado, pensando que no importaban. Pero estaba equivocado
Nunew lo miró fijamente, sus ojos entrecerrados, dudando en si debía ilusionarse ante las palabras ajenas.
—¿Deberia creerte? No quiero que te sientas obligado a estar conmigo solo por un pasado de que ya no existe
–No es una obligación, ahora lo se. No mentí al decir que sería un honor para mi que seas el amor de todas mis vidas..
Mencionó haciendo alusión a sus recuerdos, que estaba seguro que Nunew también los tenia. Y la sonrisa que el menor mostro luego de ello se lo confirmó.
–No se que decir...
–No es necesario que digas más, tan solo permíteme cumplir mi promesa
Nunew lo miro de nuevo, esperanzado, sintiendo como su corazón empezaba a latir de forma acelerada.
–Pense que esa promesa tambien iba a quedar en el pasado.
–Lo mismo pensaba, pero ahora se que incluso continuará en nuestro presente..
Zee le soltó un poco para hacerlo girar y en un rápido movimiento le atrapó en sus brazos. Pegando su pecho a la espalda ajena para seguir hablando.
–Porque me he dado cuenta de que eres el príncipe a quien tanto quería encontrar..
– Y tu eres el príncipe que tanto estaba esperando...
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/ –Lían eres un príncipe muy testarudo
MencionóNukuea divertido mirando al contrario.
– Espero que en nuestra siguiente vida ya no seas así.
Lian sonrió a la vez que dejaba un pequeño beso en la mejilla ajena.
–No prometo nada, pero por favor, si es que lo soy prometeme que me amaras como ahora
