Obvio que iba a huir, ese maldito loco solo tenía cara bonita.Rápidamente seokjin lo empuja con todas sus fuerzas y dándole un golpe, abre la puerta con dificultad y le da una última mirada a Taehyung quien estaba en suelo.
Seokjin solo le tira las llaves antes de correr por todo el pasillo y escaleras escapando rápidamente, su corazón iba a mil por segundos sentia la adrenalina correr por sus venasTaehyung, aún aturdido en el suelo, tomó las llaves que Seokjin le había lanzado, apretándolas con fuerza en su puño mientras trataba de reponerse.
Respiraba agitadamente, sintiendo una mezcla de furia y frustración por la "traición" que acababa de vivir. Lentamente se levantó, sus piernas tambaleantes mientras su mirada se dirigía a la puerta por donde Seokjin había huido.El eco de los pasos de Seokjin resonaba en el edificio mientras descendía las escaleras a toda prisa, intentando escapar antes de que Taehyung pudiera recuperarse del golpe.
El pasillo parecía interminable, y a cada sombra se le antojaba una amenaza.
Sin detenerse a mirar atrás, se lanzó hacia la salida, su respiración entrecortada y sus pensamientos Eran un total caos.Por su parte, Taehyung logró ponerse en pie y, con una determinación sombría, se dirigió hacia la puerta. Sin importar el dolor del golpe, decidió ir tras él.
No podía dejar que Seokjin se escapara después de todo lo que había hecho para tenerlo bajo de el.Seokjin salió finalmente al exterior del edificio, sintiendo el frío de la noche golpeando su rostro impresionado de lo rápido que había anochesido.
Apenas tenía tiempo para respirar antes de echarse a correr por la calle, sus ojos recorriendo el entorno en busca de un lugar donde esconderse. Pero cada paso que daba lo alejaba más de su propia calma; el peso de su instinto de supervivencia seguía impulsándolo.Detrás de él, Taehyung salió del edificio tambaleante, con la mirada fija en Seokjin, quien se alejaba cada vez más.
La furia que sentía lo mantenía firme, dándole fuerzas que ni siquiera sabía que tenía.
Sus labios temblaban de rabia contenida mientras sus ojos no perdían de vista a su objetivo.Seokjin dobló una esquina, intentando perderse entre las sombras, pero sus movimientos desesperados lo delataban.
Sintió una presión en el pecho al escuchar los pasos acelerados de Taehyung aproximándose.
Había algo implacable y aterrador en aquella persecución.El silencio de la noche solo acentuaba la tensión entre ambos.
Justo cuando Seokjin pensaba que estaba a salvo, giró la cabeza y vio a Taehyung, tan cerca que podía sentir el odio en su mirada.
Seokjin asustado corre aún más tambaleándose en algunos pasosSeokjin siguió corriendo, girando frenéticamente por cada esquina y callejón que encontraba, intentando dejar a Taehyung atrás.
Sin embargo, en su desesperación, se dio cuenta de algo que le heló la sangre: no reconocía el lugar.
Las calles comenzaron a parecerle todas iguales, estrechas y oscuras, con luces titilantes que apenas iluminaban el camino.El eco de sus propios pasos y el sonido lejano de los de Taehyung lo atormentaban.
Al detenerse un instante para orientarse, miró a su alrededor, tratando de identificar alguna salida, algún lugar seguro.
Pero los callejones parecían un laberinto inescapable.Mientras tanto, Taehyung continuaba su persecución, cada vez más seguro de que Seokjin se estaba enredando en las calles desconocidas.
La ligera ventaja que Seokjin había ganado al principio se desvanecía a medida que sus movimientos se volvían torpes, impulsados más por el miedo que por la estrategia.Finalmente, Seokjin se detuvo frente a una pared sin salida.
Jadeando y con el corazón desbocado, comprendió que estaba atrapado.
Los pasos de Taehyung, cada vez más próximos, le hicieron cerrar los ojos un instante, intentando recuperar la calma, aunque supiera que ya era demasiado tarde para huir.
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Secuestrado (Taejin)
RandomEn medio de la euforia de un concierto, seokjin se encuentra extasiado al ver al objeto de su afecto, a quien considera el amor de su vida, aunque hasta ese momento lo percibía como inalcanzable e insuperable. Sin embargo, la realidad se torna sinie...