(POV de Suguru)
Desde que lo vi por primera vez, supe con quién estaba tratando. Esos ojos eran inconfundibles, su personalidad era única, no hay nadie más en el mundo que pueda imitar a Satoru Gojo.
Cuando era pequeño, luego de que Satoru se marchara, en el orfanato me había contado que se había ido muy lejos por mi bien. Sin embargo, no sabía que nos volveríamos a reencontrar en la misma ciudad en la que nos habíamos separado.
Quizás el no conozca nada acerca de Isaac York, pero yo sí sé que Dominic Mountbatten es Satoru Gojo, mi hermano mayor, mi amado. La persona a quien alguna vez vi como familia fue la persona a quien le he entregado mi amor y muchas primeras veces.
Lo ame y lo sigo amando, pero no de la misma forma que lo amaba hace diez años. Me puse contento cuando supe que me quería de la misma forma que yo a él, pero... ¿Me seguiría amando de esa forma una vez que sepa quién soy yo realmente?
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-Suguru Geto –dijo Dominic con una sonrisa-. Yo le puse ese nombre.
-Es un buen nombre... -dije con la poca calma que me quedaba -. Estoy seguro de que incluso a él le gusta mucho ese nombre.
- ¿Tú crees? –alzó sus delgadas y blancas cejas-. Suguru Geto tiene diversos significados, pero también puede ser visto como una expresión de esperanza y excepcionalidad, por eso lo elegí.
- ¿Esperanza y excepcionalidad...? –me pregunto que habrá visto en mi para ponerme ese nombre tan único y especial.
-Sí, mi hermanito llegó a mi triste y aburrida vida, gracia a él no perdí la esperanza de que mi vida podría significaba algo...
-Ya veo, entonces... -ya no quería seguir continuando con el tema-. ¿Qué piensas escribirle en la carta?
-No lo sé muy bien, esperaba que tú me ayudaras...
-Dominic... -di un largo suspiro-. La única persona que puede saber lo que sientes, lo que piensas y lo que quieres decir, eres tú, no yo.
-Tienes razón, pero... -me miró fijamente a los ojos-. Ha sido gracias a ti que he logrado descifrar mis propios sentimientos, ¿no puedes ayudarme, aunque sea una vez más?
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(POV en 3ra persona)
Cuando la mañana llego, Satoru y Suguru se prepararon con mucha prisa, ya que el albino se había quedado dormido y Geto paso mucho tiempo tratando de despertarlo y levantarlo de la cama. Luego de llegar un poco tarde a la academia, Gojo procedió a ir a tomar clases mientras el pelinegro lo esperaba sentado al fondo del salón.
Una vez que las clases concluyeron, los dos regresaron al dormitorio con tranquilidad. Al llegar a la puerta de la habitación, Satoru y Suguru se sorprendieron al ver que había muchas cajas y bolsas afuera, todas iban dirigidas hacia Gojo.
Algo que el peliblanco no se había percatado, pero Geto sí, es que entre todos esos "regalos" también se encontraba una carta.
Y el remitente era nada más y nada menos que el duque, Edward Mountbatten.
Lo más inquietante era el contenido de la carta...
Una propuesta...
Sin embargo, Suguru decidió no mostrársela a su amado alumno, aun no era momento de separarse.
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¿Nos volveremos a ver? [SatoSugu]
Romance𝕴𝖓𝖌𝖑𝖆𝖙𝖊𝖗𝖗𝖆, 𝖘𝖎𝖌𝖑𝖔 𝖃𝖃 . . . . . . . . . . . . Satoru Gojo y Suguru Geto eran dos niños huérfanos abandonados a su suerte en las calles frías y neblinosas de Londres. Siendo ambos hijos de inmigrantes japoneses d...