Capítulo 3

86 10 2
                                    

(POV de Suguru)

- ¿Puedes dormir conmigo?

Me quedé boquiabierto ante tal pregunta. Lo peor de todo es que lo dijo de una forma tan seria y natural que no parecía broma lo que me estaba proponiendo. No esperaba que un hombre le fuera a decir eso a otro. Es... raro, inapropiado, imposible...

Es algo tabú.

-Dominic... No le puedes pedir eso a otro hombre –disiento con la cabeza-. Es inapropiado, ni siquiera somos familiares. No lo vuelvas a hacer, a no ser que se trate de tu futura esposa. –regañé, aunque se sintió extraño hablarle de manera informal.

- ¡Espera, no lo pido con malas intenciones! –dio un brinco de su cama a la mía-. Es solo que... A veces me siento deprimido... –hizo un puchero.

- ¿Hay algo que lo esté molestando? –no es normal que se deprima tanto al punto de querer dormir con su profesor-. Si tiene relación conmigo, por favor hágamelo saber.

Estaba seguro de que yo no era la razón de su malestar emocional. Hasta ahora, todos mis alumnos habían sido muy bien portados, me amaban como si fuera su padre o hermano mayor. A lo mejor tenía que ver con la edad, los cambios hormonales de la adolescencia (aunque ya estaba grandecito para eso), yo qué sé.

-No... No estoy listo para contarte mis razones... -agachó la cabeza- ¡Pero...! –me agarró de los hombres con fuerza-. Ten por seguro... Que no se trata de ti, se trata de mi...

-Joven Dominic...

- ¡En fin! –se regresó a su cama- Si no quieres dormir conmigo, entonces no lo hagas –dijo con un tono infantil molesto-. ¡Buenas noches! –agarró sus cobijas y se cubrió con ellas.

Elegí no decir nada, de todas formas, ya era muy tarde y estaba cansado. No tenía energías para andar lidiando con él, así que imité lo que hizo él hace unos segundos, me cubrí con las sábanas y me eché a dormir.

.

.

.

.

.

.

(POV en 3ra persona)

Internado de Varones Mayfields, 1905.

Durante la clase de etiqueta los alumnos se encontraban en una mesa larga, alrededor de 15 personas se encontraban sentados, excepto por Suguru.

Satoru simplemente se centraba en comer la comida que estaba enfrente de él, importándole un bledo los modales de la mesa que tuviera que seguir.

-Oye... –susurró Yu Haibara, quien se encontraba sentado al lado del albino-. ¿Cómo fue que un chico tan asombroso como Isaac llegó a ser tu profesor? –intentó acercarse más de lo debido a Satoru.

- ¿Qué...? –Gojo se sintió indignado por la pregunta e incómodo por la corta distancia entre ellos. Trató de separarse levantándose de su asiento, pero accidentalmente tiró un vaso con agua, mojando el mantel de la mesa y parte del pantalón de Haibara.

- ¡Una disculpa, joven Haibara! –Suguru rápidamente fue hacia Yu y se arrodilló ante el chico, para luego sacar un pañuelo y ofrecérselo.

- ¡No, no! –Haibara sacudió sus manos-. No pasa nada, gracias por el pañuelo...

Con todo el mundo observando el pequeño incidente, Satoru no sintió nada más que vergüenza por su comportamiento y frustración por Suguru dándole su atención a otra persona. Como resultado, el peliblanco se marchó de la sala, dejando a un público desconcertado y a un pelinegro persiguiéndolo.

¿Nos volveremos a ver? [SatoSugu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora