BLACK SWAN (JENLISA)

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"Y siento celos al pensar que un día, alguien, que no te ha visto todavía, verá tus ojos por primera vez ".

~ José Angel Buesa

CAPITULO 4
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Los celos de la reina

LISA

Mientras salía del trabajo, el día parecía más pesado de lo habitual. Decidí que era hora de hablar con alguien que siempre me hiciera sentir mejor, así que saqué mi teléfono y marqué el número de Rosé. Su voz juguetona siempre lograba levantarme el ánimo.

[— ¡Hola! ] —contestó ella, con esa energía contagiosa que la caracteriza —. [ ¿Qué tal, Lisa? ¿Has sobrevivido a otro día en la jungla laboral? ]

—¡Hola, Rosé! —le respondí, sonriendo a pesar de mi malestar —. Más o menos. Necesito desahogarme un poco.

[ — ¿Desahogarte? ¡Esto suena serio!] —exclamó, como si estuviera a punto de descubrir un gran secreto —. [¿Te han dado una tarea imposible o tu cuñada finalmente se murió? ]

No pude evitar soltar una risita. A pesar de todo, su sentido del humor siempre funcionaba como un bálsamo.

— No, no es eso... Es solo que estoy lidiando con algunos celos y no sé cómo manejarlo.

[ — ¿¡Celos!?] — gritó Rosé, como si hubiera encontrado la solución a un gran misterio —. [ — Pero si tú eres la reina del drama. ¿Qué pasa, que Jennie se está robando tu corona? No me extrañaria que quiera tenerlo ]

Me reí de nuevo, aunque el nudo en mi pecho seguía ahí.

— Es más complicado que eso... No quiero arruinar nuestra relación.

[ — Entiendo, pero si necesitas desahogarte de toda ésta mierda, solo recuerda que yo tengo un arsenal listas para salir a la luz. Podemos salir de compras o sencillamente podemos salir a caminar como los viejos tiempos ]

La idea me hizo sentir un poco mejor. La risa siempre había sido nuestra medicina.

— Eso podría ser divertido... Pero no sé si estoy lista para eso.

[ — ¡Vamos! ¡Tú puedes! ¿Y si hacemos un trato? Te parece si hablamos mal a las espaldas de esa Jennie, y si me sorprende yo iré contando los momentos mas chistoso e vergonzoso que me hizo pasar Jisoo. Sobretodo la vez que fingió ser una profesional en la cocina; así nos reímos y te sientes mejor ]

Me encantó su propuesta y sentí que el peso en mi corazón se aligeraba un poco.

— Está bien, trato hecho. Pero ten cuidado con tus bromas... ¡puede que me haga reír y llore al mismo tiempo!

Rosé soltó una carcajada.

[ — Eso sería un espectáculo digno de ver. Conociendo a tu reina del drama, no me extrañaría. Siempre ha sido así desde que la conozco ]

Y así, entre risas y bromas, el malestar comenzó a desvanecerse poco a poco. Sabía que hablar con Rosé era justo lo que necesitaba para enfrentar mis celos y encontrar una forma de manejar mis sentimientos sin perderme en la tristeza.

Después de esa llamada acordamos reunirnos con nuestros viejos amigos del campus de la universidad. Fuimos a un local donde la carne y algo de Soju era lo mejor de todo, era tan, delicioso que podía pasar toda la noche tomando como si no había nada más que eso…. Solo el licor a soju

— ¡Hey! ¡Miren quiénes están aquí! — gritó uno de ellos, acercándose con una sonrisa amplia —. ¿Qué están haciendo?

— ¡No puedo creer que sean ustedes! — exclamé mientras uno de ellos me abrazaba — Ha pasado tanto tiempo.