» Rencuentro

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Xichen miraba por la ventana de su apartamento, perdido en sus pensamientos. Las luces de la ciudad parpadeaban en la noche, pero su mente estaba atrapada en recuerdos del pasado. Habían pasado tres años desde que Wanyin y él decidieron separarse. Fue una decisión difícil, llena de discusiones y lágrimas, pero al final, la distancia se había vuelto insostenible.

Las cosas entre ellos habían cambiado. La pasión que una vez los unió se había desvanecido, reemplazada por una frustración silenciosa que ninguno de los dos supo cómo manejar. Aunque la ruptura fue dolorosa, Xichen había intentado seguir adelante, enfocado en su trabajo y en sus amistades. Sin embargo, Wanyin siempre estaba presente en su mente, un eco constante de lo que alguna vez fue.

Una tarde, mientras revisaba su teléfono, se encontró con una notificación de una red social. Wanyin había compartido una foto de un evento de arte en la ciudad. Su corazón dio un vuelco. Era como si lo estuviera llamando. Después de unos segundos de indecisión, se encontró enviando un mensaje: "¿Vas a estar en la exposición este fin de semana?"

La respuesta fue casi inmediata. "Sí, estaré allí. ¿Te gustaría ir?"

Xichen sintió una mezcla de emoción y nerviosismo. Después de unos momentos, escribió: "Me encantaría".

El día de la exposición llegó. Al entrar, una ola de nostalgia lo envolvió. Las obras de arte, el bullicio de la gente, todo le recordaba a Wanyin. A medida que caminaba, su corazón latía con fuerza, preguntándose si lo vería.

Finalmente, lo encontró. Wanyin estaba de pie junto a una pintura, hablando animadamente con un grupo de amigos. Su cabello había crecido un poco, y su sonrisa seguía siendo tan cautivadora como siempre. Cuando sus miradas se encontraron, el tiempo pareció detenerse.

"Xichen", dijo Wanyin, su voz llena de sorpresa y algo más, algo que parecía un eco del pasado.

"Hola, Wanyin", respondió Xichen, sintiendo que sus palabras se atascaban en la garganta. "Te ves... bien".

"Gracias. Tú también", contestó Wanyin, un leve sonrojo apareciendo en sus mejillas. La tensión en el aire era palpable, una mezcla de nostalgia y algo que ambos parecían estar sintiendo de nuevo.

La conversación fluyó con cierta torpeza al principio, llena de preguntas sobre sus vidas. "He estado trabajando en una galería", dijo Wanyin, su pasión brillando en sus ojos. "Y tú, ¿qué tal en el trabajo?"

Xichen se dio cuenta de cuánto había extrañado esa chispa en los ojos de Wanyin. "Sigo en la arquitectura. Ha sido un desafío, pero me gusta".

Mientras hablaban, la conexión que había existido entre ellos comenzaba a renacer. Recordaron viejas anécdotas, rieron de cosas que parecían irrelevantes, pero que significaban mucho. A medida que la noche avanzaba, la incomodidad inicial se desvaneció, y el familiar sentido de complicidad volvió a surgir.

Finalmente, después de recorrer la exposición, Wanyin propuso salir a tomar algo. "¿Qué te parece? Me gustaría hablar más contigo".

Xichen asintió, sintiendo que su corazón latía con fuerza. Mientras caminaban hacia una cafetería cercana, la conversación se tornó más profunda. Hablaron sobre sus sueños, sus fracasos y lo que habían aprendido en los años pasados. Había una vulnerabilidad en sus palabras, un entendimiento de que habían crecido, pero que una parte de ellos seguía atada al otro.

Cuando se sentaron a tomar café, Wanyin lo miró con intensidad. "A veces, me pregunto si debimos haberlo intentado de nuevo".

"Yo también lo he pensado", admitió Xichen, sintiendo una oleada de honestidad. "Pero en aquel momento, era lo mejor para nosotros".

Wanyin asintió, pero había algo más en su mirada. "Tal vez ahora las cosas sean diferentes. Hemos cambiado".

Xichen sintió que un nuevo hilo de esperanza comenzaba a tejerse entre ellos. "Me gustaría intentarlo. Si tú también lo deseas".

Wanyin sonrió, y en sus ojos había una mezcla de sorpresa y felicidad. "Sí, me gustaría".

A medida que compartían risas y miradas, Xichen supo que, aunque el camino hacia la reconexión no sería fácil, valdría la pena. Habían tenido su tiempo de separación, pero el amor que una vez compartieron parecía estar renaciendo con fuerza, listo para enfrentar un nuevo capítulo.

Y así, entre sorbos de café y risas, comenzaron a soñar de nuevo, juntos.

✨💙ONE-SHOT || XICHENG💜✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora