El legado de Kasius

7.La calma

Todo el equipo Yin estaba reunido en una de las salas de descanso para celebrar el regreso de Jay.

Viktor fue el primero en romper el hielo, como siempre con su característico humor sarcástico. Con una sonrisa de medio lado, se acercó a Jay y le dio un golpe amistoso en el hombro.

—"Bueno, sobreviviste a otro día. Ya estaba pensando en qué escribir en tu epitafio, pero supongo que puedo guardarlo para más tarde" —dijo con una sonrisa, mientras los demás soltaban risas.

Jay sonrió con cansancio, pero estaba agradecido por tener a su mejor amigo de su lado.

Lucy, siempre la más animada del grupo, se dirigió a la mesa y levantó una copa improvisada. Con su energía contagiosa, miró a todos los presentes.

—"¡Por nuestro lider! ¡El tipo que sigue regresando de la muerte solo para hacernos quedar mal!" —bromeó, provocando una carcajada general en el equipo. A pesar de su tono ligero, había un trasfondo de genuina admiración en sus palabras. Lucy siempre encontraba una manera de levantar los ánimos, sin importar la situación.

Mientras tanto, Selena observaba desde un rincón con una sonrisa discreta. Aunque no era de muchas palabras, sus ojos seguían a Jay, evaluando cada pequeño detalle, como era su costumbre. Era protectora, aunque rara vez lo expresaba en voz alta. Aún así, la conexión entre ambos era evidente, aunque ninguno de los dos parecía saber qué hacer con ella.

Shiva, como era de esperarse, no perdió la oportunidad de acercarse más de lo habitual a Jay. En un movimiento casi imperceptible para los demás, se colocó a su lado y apoyó una mano en su hombro, inclinándose hacia él con una sonrisa traviesa.