Príncipe y Prometido - Serie Tribunales Peligrosos #V - Hyunlix.

Epilogo.

Antes del solsticio de Song.

Hyunjin contempla la nueva incorporación al salón de Junho. Las jaulas de cristal y rejilla se han ampliado hasta ocupar toda una pared. Ratas blancas manchadas de lavanda corretean entre los niveles. Otras se acurrucan en nidos de aserrín. Una mesita junto a las jaulas contiene un cuenco con pequeñas golosinas.

Felix toma té en el sofá de Junho. Junho no le había ofrecido el té, por supuesto. Felix había sugerido que tomaran una taza juntos, usurpando descaradamente el papel de anfitrión en el salón de Junho.

Junho está recostado en una silla, con la pierna estirada sobre el brazo. Aparentemente cómodo, pero con una mirada cautelosa. Va vestido con demasiados cinturones y hebillas de cuero, como de costumbre, con el cabello recogido en una trenza desordenada. Unas tenues sombras bajo sus ojos.

Traer a Felix a esta reunión fue una buena idea. De este modo, Hyunjin podría mantener una conversación con su hermano menor. Está claro que Junho siente debilidad por Felix, aunque nunca lo admitiría.

Han pasado menos de tres meses desde la última vez que Hyunjin y Felix estuvieron en Ostomar. El tiempo parece tanto años como un instante. Tienen una hora antes de reunirse con el rey y la reina para el almuerzo. Con suerte la comida familiar privada de hoy será menos agitada que la anterior.

— ¿Te has llevado algo más que las ratas del laboratorio de Changkyun? —pregunta Hyunjin, uniéndose a Felix en el sofá.

—Todo lo que he podido tomar. —Junho hace rebotar el tacón en el aire—. Que no fue mucho.

Hyunjin acepta una taza de té de Felix. Se quedan en silencio hasta que Felix deja su té y se endereza. Hyunjin y Felix lo habían planeado... obtendrán más información si Felix dirige la conversación. Felix será dulce y discreto, atrayendo a Junho para que revele más de lo que quiere.

—Dime, Junho —dice Felix—. ¿Convenciste a Changkyun para que me secuestrara?

Hyunjin se atraganta con el té. ¿Qué pasó con la dulzura y el tacto?

Junho se gira para sentarse correctamente en su silla. —No estaba seguro de que lo haría, pero era consciente de que era una opción. Un hombre tan codicioso. Había llegado a lo más alto en Ostomar.

Hyunjin se enfurece. Sólo la mano de Felix en su pierna lo mantiene en su lugar, como Hyunjin impidió que Felix ayudara a la general Choi en el banquete.

— ¿Por qué no me avisaste? —Pregunta Felix, mucho más tranquilo que Hyunjin—. Pensé que nos estábamos haciendo amigos.

— ¿Amigos? —Junho se burla—. Qué horror.

Felix espera.

Tras un momento jugueteando con su cabello, Junho se pone en pie de un salto. Él rellena su té, echa demasiado azúcar y se pasea alrededor de la silla antes de volver a sentarse. Cruza las piernas y luego las descruza.

Mientras Junho se agita, Felix permanece en silencio y quieto, apoyado en el brazo de Hyunjin.

—Dejé que pasara todo porque supuse que matarías a Changkyun —Junho dice finalmente, mirando Directamente a Hyunjin—. No que le dejarías escapar.

—Changkyun no escapó —dice Hyunjin.

Junho abre mucho los ojos. —Oh. Qué bien, entonces.

Felix empuja su taza de té vacía hacia la mano de Hyunjin. Mientras Hyunjin la rellena Felix se inclina hacia delante. —Querías a Changkyun muerto porque sabías en qué estaba trabajando. ¿Qué era?