Ecomoda; Betty x Daniel

capítulo 6

capítulo 6: La cena.

Beatriz ajustó su blusa frente mirándose en el espejo, era de un estilo formal como el que acostumbraba pero no estaba segura si era apropiado para la ocasión. Volvió a mirar su guardarropa esperando encontrar algo mejor.

Finalmente había decidido acompañar a Daniel a la cena familiar, después de tanta insistencia reflexionó en que quizás no quería estar solo; menos en el mismo espacio que Armando Mendoza, un ser que despreciaba enormemente.

Para ella tampoco sería fácil lidiar con él y con Camila, quién ni siquiera conocía pero escuchar su nombre le provocaba malestar. Podía intuir las intenciones de esa mujer y eso no le gustaba, pero no actuaría como una celosa e inmadura frente a los Mendoza.

Al menos ir era mejor que estar en casa imaginándose escenarios sobre situaciones que pudieran pasar.

Vio la hora en el reloj: si no decidía pronto su vestimenta llegarían tarde, y tanto ella como Daniel odiaban la impuntualidad, aunque le parecía extraño que su esposo no estuviera llamándola todavía ¿qué estaría haciendo?

Valencia llevaba largos minutos sentado en el sofá, su preparación no fue tan extensa como la de Betty, tan solo se había puesto un pantalón de tela y un camisa manga corta, hace tiempo no usaba su gel para el cabello y solo se peinaba para estar ordenado.

Su ocupación eran sus pensamientos, recordaba con vivido detalle como Armando no dejó de mirar a su esposa durante todo el tiempo que duró la reunión con los preparativos para el lanzamiento. Se sintió desconcentrado un par de veces, qué tenía ese tipo que no la dejaba en paz.

Decidió enfrentarlo y enojado, le dijo que dejara en paz a Beatriz y a Marcela, que si no lo hacía tendría consecuencias. Armando soltó una risa sarcástica ante su comentario pero para ahorrarse problemas justo el día que se reunirían para cenar, le contestó que sí, no las molestaría más. Sin embargo, Daniel sabía que no estaba siendo sincero y maldijo el día que encontraron bueno que él regresara a Ecomoda.

— Amor, ¿ya estás listo?— preguntó Betty sacándolo de sus pensamientos.

— Hace rato, ¿nos vamos?— dejó de mirar el gran ventanal para mirar a su esposa, quedó boquiabierto— ¿acaso vamos a celebrar nuestro aniversario por adelantado o por qué está tan... bella vestida?

Beatriz rió ante su comentario, sonrojándose negó con la cabeza, definitivamente nunca se acostumbraría a esos halagos. Su respiración se entre cortó cuando Daniel invadió todo su espacio personal para arrinconarla contra la puerta.

— Sabe que esa blusa que se puso provoca quitársela a mordiscos— aspiró el aroma de su cuello sintiendo de inmediato un calor dentro de él — Estoy reconsiderando la idea de salir, Beatriz -.

La voz ronca y el beso en el cuello debilitaron a Betty, pero sabía que tenía que detenerlo. No podían quedar de incumplidores con esa familia, no quería más comentarios en contra de ella de parte de Margarita o Marcela. Así que con mucho pesar, puso las manos en los hombros de Daniel y le pidió que salieran ya. Él la miró decepcionado con su clasico tsk tsk tsk.

— Mientras más rápido lleguemos allá, más luego volvemos al apartamento—

Logró convencerlo y luego de un par de besos apresurados, salieron del apartamento rumbo al campo donde Roberto y Margarita hospedaban junto a la familia.  Beatriz se había enterado hace poco que Armando vivía allí con ellos, pues sus propiedades las tenía a disposición de Ecomoda y no quería arrendar otro apartamento, además les servía para cuidar la casa.

— ¿Estás muy ansioso?— le preguntó al notar como apretaba fuertemente el volante.

— Fastidiado. El lanzamiento es dentro de poco, aún tenemos mucho trabajo sino fuera porque Roberto me lo pidió no vendríamos a esta junta.