Negocios

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Bueno, verás, lo pensé una vez cuando desperté en la mañana en el departamento de mi ex mientras estaba sentado tocando su guitarra como en una película romántica, pero acaba de terminarme con una llamada, así que bueno....

-¿Que? No, claro que no.- dije haciéndome para atrás y frunciendo el seño

-¿Enserio? ¿Por qué no?.-

-¿Por qué te interesa?.- dije a la defensiva

-Curiosidad, para hacer plática Geniéve.- dijo desinteresado.- Pero al parecer presione un botón ¿Cierto?

¡Mierda!

-No,claro que no, pero no es muy normal que alguien que acabas de conocer haga ese tipo de preguntas.

-¿Ah no?.- enarco una ceja .- ¿Con que preguntas debo de empezar?

-Pues... No lo sé, depende el contexto y las intenciones.-

¿Que?¿Yo dije eso?

-Dificil conocer a alguien en estos tiempos ¿No?.- respondió burlón

-El matrimonio no es la primera pregunta, definitivamente.- resople

-Te equivocas.-

-¿Ah si?.-lo interrumpí

-Si, contrario a lo intenso que crees que parece, dice mucho de una persona.- respondió guiñandome el ojo.- En fin, seguramente está no será la única plática que tendremos respecto a este tema. Tal vez para la próxima, tu opinión sea diferente.

-No creo que...-

-Te veo adentro Gen .- dijo interrumpiendome y dándose la vuelta hacia la entrada.

Gen, me dijo Gen.

Ni dos horas tenemos aquí y ya se tomó la libertad de decirme Gen.

Espere afuera unos minutos intentando descifrar que había sido todo eso, mi mente estaba trabajando muy lento el día de hoy.

Entre de nuevo y todos estaban en el salón, parecían tener platicas muy interesantes.

Mis tacones resonaban en el piso, trate de guardar el equilibrio pero parecía que en cualquier momento terminaría en el suelo, las piernas me flaqueaban.

Me acerque a Clarisse tratando de buscar un poco de consuelo.

-Creo que me siento mal.- le hablé por debajo

-¿Por qué linda?¿Que tienes?.- dijo tocandome la frente, hecho que hizo que todas las miradas se dirigieran a nosotros.

-¿Algún problema Gen?.- pregunto la Sra. D'Laine

-No ninguno, no se preocupe.-

-Dijo que se sentía mal Papá.- le dijo Clarisse volteando
Yo le pegue en la pierna.

No quería armar un lío.

-No, descuiden, solo estoy un poco mareada.- respondí apenada

-Podemos llamar a un doctor si quieres ¿Por qué no descansas en algún cuarto?.- hablo el señorito de voz ronca.

No soy Elizabeth Bennet y esto no es orgullo y prejuicio Bastian.

-No es nada de que preocuparse, aún así gracias, me gustaría quedarme pero tal vez deba de regresar a descansar.-

-Yo te llevo.- respondió Bastian levantándose.- Aunque insisto, puedes quedarte aquí.

-Eres muy amable, todos ustedes lo son familia D'Laine. Descuida Bastian, el chófer puede llevarme.

-Me sentiría más cómodo si te lleva Bastian .- escuché decir a mi padre

Volteé a verlo totalmente sorprendida.

-No es mi intención causar molestias.-

-No eres una molestia Geniéve, y yo también me sentiría más cómodo dejándote en la puerta de tu casa.-

Me quedé congelada en medio de la mirada de todos, no supe que decir ni que hacer.

Quería salir corriendo, tomar el coche yo sola y largarme de ahí.

-De acuerdo, gracias.- dije levantándome hacía la salida.- Fue un placer conocerlos y nuevamente, mil disculpas.

-No te preocupes cariño, espero que te mejores. Nos vemos en la fiesta de mañana.- se despidió la mamá de los Bastian dándome un beso en la mejilla.

Me despedí de todos y camine hacia la salida con Bastian detrás de mi.
Sentía su mirada y eso me tensaba cada vez más.

Aún venía sobre pensando cuando vi como se adelantó para abrirme la puerta de su muy lujoso auto.
Me subí tratando de esquivar la analítica mirada del hombre.

-Disculpa, no era mi intención sacarte de la cena.-

-Deja de disculparte Geniéve, estás cosas pasan.- dijo mirando hacía el frente con las manos en el volante.

¿Por qué se veía tan bien?

-Ahora, dime el camino hacia tu casa .-

-¿Cómo sabes que es mi casa?Podría ser un hotel.-

Río levemente.

-Tu padre odia los hoteles y con el dinero que tiene, dudo que aún no se haya comprando una propiedad en cada lugar que frecuenta.

¡Si era cierto! ¿Pero por que lo sabe?

Quiero decir, no es un secreto, pero es raro que alguien sepa tanto de tu familia ¿O no?

-Claro.- dije sarcásticamente.- entre millonarios se entienden ¿No?

-¿Te molesta Gen?.- volteo a verme

¡Otra vez me dijo Gen!

-No... Solo.. llévame a casa ¿Si?.- dije un poco molesta.

El camino hacia mi casa no era más de 15 minutos, pero sentí que llevábamos tres horas.

Nadie dijo nada después de que hablé.

Cuando llegamos me dispuse a darle las gracias y bajarme del coche, pero su mano se puso al frente de mi cuerpo impidiendo que yo abriera.

-Permiteme,todavía quedamos caballeros.-

Me quedé inmóvil viendo como se bajaba del auto y caminaba por el frente hasta mi puerta .

-Gracias.- dije bajandome del auto.- Nuevamente, lo siento, y gracias por traerme.

No respondió.

Me di la vuelta caminando hacia la puerta.

-Geniéve,tengo la impresión de que no te caí bien, espero que en algún momento pueda cambiar esa impresión. Descansa.

Yo seguía volteada hacia la puerta tratando de abrir.
Mis dedos no respondían y yo tampoco quería voltear y darle la cara a Bastian.




Prometo siempre odiarte, MI AMOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora