Al iluminarse todo rincón de aquella cochera, se dejó ver lo que guardaba en su interior.
Habían varias mesas y dos sillas en frente de esta repartidas por la habitación con notas de papel encima de cada una de las mesas, las paredes y el techo estaban insonorizados, en el techo se encontraba a simple vista un altavoz pegado con cinta aislante de manera muy cutre y al fondo de la cochera habia una montaña de calcetines sucios.
Al ver todo el escenario Marc dio media vuelta e intentó abrir la puerta de inmediato, estaba bloqueada ya que se abría hacia fuera.
Marc: Ven Ainhoa, ayúdame con esto.
Dijo haciendo referencia a la puerta.
Ainhoa se acercó y se apoyó en la puerta con su hombro derecho.
Marc: Conmigo, 1, 2 y... 3.
Los dos empujaron fuerte hacia fuera, no había manera de abrir esa puerta, fuese lo que fuese que estuviera detrás de esa puerta tenía que ser muy resistente.
Ainhoa: Dios... ¿Qué vamos a hacer ahora? No puedo creer que la miserable de mi hermana nos esté haciendo esto, todavía no me lo explico...
Marc: Debe haber una forma de salir de aquí, piensa.
Los pensamientos de ambos fueron interrumpidos por el altavoz del techo.
"Jejeje... Así que caisteis en mi trampa, a decir verdad, tarde o temprano ibais a acabar aquí, solo era cuestión de esperar"
Marc: ¡Qué es lo que quieres, por qué nos haces esto!
"Oh, no me malinterpres Marc, no es nada personal, simplemente es por diversión, ese es el fin"
Marc: ¿¡Y te parece bien todo lo que estás haciendo, conmigo, con tu propia hermana!?
"Pff... Que aburridos sois, no es para tanto, que dramáticos"
Marc: ¡Dinos cómo podemos salir de aquí!
"Ah, si, eso, lo único que debéis de hacer es acercaros a las mesas en el orden que corresponden, mirando el número pintado en la pared más cercana de cada una. Una vez allí debéis de poner en practica los retos relatados en los papeles que se encuentran encima de las mesas, estos retos irán tiñéndose a más complicado durante los mismos.
Dicho esto, os dejo disfrutar de vuestro rato a solas, jajajajaja"Ainhoa: Dios... Puta... Perra, la odio.
Dijo mientras caían unas pocas lágrimas de sus ojos.
Marc la abrazó y le dió un beso para tranquilizarla y hacerle saber que no está sola en esto.
Marc: Tranquila, juntos saldremos de aquí.
Ainhoa, con el brillo de sus ojos puestos en la dulce y a la vez ruda mirada de Marc le devolvió el beso.
Marc: Bueno, manos a la obra.
Los dos se acercaron a la primera mesa y Marc cogió el papel de la mesa.
"El reto es el siguiente: Ainhoa deberá ir a la montaña de calcetines, rodearla y tomar unas botas que estarán en el suelo, luego, las traerá y cada uno olerá una bota durante 5 minutos, después del tiempo dicho, intercambiareis las botas y haréis lo mismo con la otra."
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Paciente no, esclavo
Cerita PendekUn chico acude a una consulta por primera vez en su vida para tratar de arreglar sus problemas con su nueva psicóloga, lo que no sabía es que aquello le traerían más de los que ya tenía...