Una eriza desconocía llego a Isla Angel siendo enviada por el tío de Sonic con el propósito de hacer investigaciones en dicho lugar
Pero hay algo que un misterio ella oculta.
Shadow intentar recordar sobre su pasada, y al mismo tiempo cierta eriza i...
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"Momentos antes de lo ocurrido".
Estiro sus pies y hizo algunos ejercicios para calentar antes de correr, sentía toda esa sensación de adrenalina subir por sus venas lo hacía sentir libre.
–Sin duda el gran cañón es el mejor lugar para una carrera.
–para la persona más rápida si que lo es.
Hablo el zorrito a través del comunicador. Estaba sentada sobre el ala de su avión mientras calculadora la velocidad de su amigo.
–Obvio que si–acelerado–¿Cómo va mi conteo Tails?
–Genial bro, 144 kilómetros por hora–anotó en su cuaderno hello doggie–Podría ser un nuevo récord para ti Sonic.
–Eso es música para mis oídos.
Recorrrio atajos por el cañón, era prácticamente un laberinto desde el interior. Dejaba una rajada azul en el camino, moviendo un poco la tierra a su paso.
Tails bebió un poco de su fugo en caja. Miro en su tableta la trayectoria de su amigo, sin embargo hubo un punto rojo ingresando al cañón.
Se movía muy rápido, eso no era bueno.
–Hey Sonic, detecto algo acercando y se ve muy veloz.
–¿Muy rápido dices?–alzo una ceja .
El punto rojo iba muy cerca de su amigo azul. Tuvo una idea sobre el desconocido, eso lo preocupó.
–¡Sonic, cuidado!
–¿Por qué?
Recibió un golpe al costado cayendo sobre la pared de rocas.
Hubo polvo regado por el sitio no logrando percibir al sujeto. Pero no necesitaba explicación para saber quién era.
–¿Porque no puedo tener una buena mañana sin ver tu asqueorsa cara Sonic?–añadió con enfado.
Adolorido se levantó del suelo, ya era costumbre recibirlo así en sus encuentros
–Primero que nada buenos don Gruñón–dijo con cierto sarcasmo– Y segundo no mi culpa que te cruces justo en mi camino.
–Querrás decir qué tú te entrometiste en mi camino azul–contratado cruzando los brazos.
–Tranquilo viejo– camino unos pasos–Para que veas que soy generoso te dejaré el camino libre.
Sonrió indicando el laberinto. El azabache rodó los ojos.
–No me molesto Sonic, no estoy de humor para tus tonteras.
–Shadow, tú nunca estas de buen humor para nada
–¿Sonic, estás bien?–hablo Tails preocupado. Sonic presionó su comunicador.
