He querido hacer esta historia, espero que les guste😁
La vida de Steven Universe, que al principio parecía alegré y colorida, pero luego se darán cuenta él, las gemas y los demás que las cosas no siempre son así...
Y que no siempre todo es lo que a...
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¡Ahhh! ¿Tío Andy? ~ pensó Steven un poco sobresaltado, dándose la vuelta para verlo.
— T...T...Tío Andy, ¿Qué andas haciendo por aquí? — preguntó.
— ¿Qué? ¿Ya no tengo derecho de visitar a mi sobrino? — dijo Andy sonriendo, dándole un fuerte abrazo al adolescente.
Steven, inmediatamente sintió náuseas por esta acción y estuvo a punto de decirle que se fuera pero luego de pensarlo mejor.....
— Oh, por supuesto que puedes, Tío. Es más, por qué no damos un pequeño paseo, así podemos hablar a gusto — dijo Steven separándose del abrazo con una sonrisa.
— ¡Eso suena genial, sobrino! Pero espera, ¿Quiénes son....ellas? — preguntó Andy señalando a la perla y a la pequeña fusión.
— Ah, sí. Ellas son solo nuevas amigas que conocí hoy. Luego te las presento, primero quiero pasar tiempo contigo — mintió Steven.
— Oh, está bien, hijo. Entonces, ¿A dónde piensas llevarme? — preguntó Andy curioso.
— Jeje, ya lo verás Tío, ya lo verás —
El joven Gem voltea discretamente a donde estaban las dos gemas para acto seguido, guiñar un ojo a la fusión antes de seguir con su camino con Andy.
Está al entender, esboza una enorme sonrisa.
— Jajaja, en serio lo va a hacer. Jajaja, esto no pienso perdérmelo. Tú ven, hay que seguir a nuestro Diamante — dijo Azurita con un tono maligno.
La perla asiente con la cabeza y ambas les siguen el paso a los dos humanos.
Unos minutos después.
Ambos se encontraban caminando por el bosque, alejándose cada vez más de Ciudad Playa.
Siguen así, hasta que llegan a un arroyo.
— ¡Wow! Nunca había visto esta parte del bosque, es muy lindo. ¿Cuándo descubriste este lugar? — preguntó Andy contemplando el sitio.
— Fue hace un par de semanas, a veces vengo aquí para despejar mi mente — respondió Steven sin importancia.
— Jeje, es cierto lo que dices. Tal vez debería venir aquí para apartarme del mundo un momento — dijo Andy feliz.
Pero su sonrisa se borra al ver a Steven con la cabeza agachada y una mirada sombría en su rostro.
— ¿Steven, qué ocurre? — preguntó Andy con preocupación.
