VII.

1 0 0
                                    

HEAVY

La audición me había salido jodidamente bien.
Estaba muy emocionado, por qué era el sueño de mi vida, la oportunidad de mi vida.

Estaba feliz por ello.

El juez me dijo que los resultados serían colgados en la pared en breve. Y yo estaba que reventaba de la emoción.

Caminé hasta el lugar donde iban a ser puestos. Mi intención era tomar asiento ahí, pero me dieron ganas de ir al baño. Así que decidí que iría y probablemente para cuando volviera ya habrían sido publicados.

Al pasar por aquella sala grande, y de color verde pastel, sentí un leve tirón en mi cabeza. Lo cual me hizo llevar mis manos hacia ella.

No es que me hubiera dolido, pero, había sido tan repentino. Así como llegó, se fue, duro menos de un segundo.

Me había sorprendido bastante. Pero decidí solo ignorarlo y precipitarme hacia el baño.

Entre al baño, y mientras hacia mis necesidades, sentí la necesidad de hablar con Dee, quería saber cómo le había ido en su audición, y si ya la había terminado.

-Dee, ¿Que tal? ¿Ya hiciste tu audición? - cuestioné emocionado.

Hubo un silencio por espacio de unos segundos, hasta que decidí volver a hablar.

-¿Supongo que estarás ocupado? ¿No es así? - volví a cuestionar, esperando aunque sea un sonido de afirmación por su parte.

Pero de nuevo, nada más que silencio puro.

-Bro, sabes que no tienes que ignorarme, solo porfavor responde mi pregunta, al menos para saber que aún sigues vivo. - comenté nuevamente sarcástico. Esperaba obtener su clásica risilla mental.

Pero no hubo nada. No escuché nada.

Comenzaba a preocuparme, ¿Que carajos?

Y de pronto comencé a imaginarme todos los horribles escenarios posibles que podían estar pasando en este momento, y una gran impotencia me invadió el cuerpo.

¿Que tal sí había fallado la audición? ¿Que tal sí su padre se había enojado tanto con el.... Que....

No podía siquiera imaginarlo.

Intenté de nuevo.

-Dee, porfavor contestame bro, solo dí algo, lo que sea. Porfavor - supliqué, pero, nuevamente no hubo sonido alguno.

Mierda, mierda, mierda.

¿Que podía hacer?

Nada, no podía hacer nada, ¿Pero que probabilidad había de que el le hiciera eso a su propio hijo, es decir, sí, sabía que era un hijo de puta, pero.... Llegar a aquello era otro extremo.

Pensé que quizás solo estaba dormido, o simplemente no quería responderme, lo cual me parecía mil veces mejor que pensar lo anterior.

Ya había pasado un par de minutos, así que decidí que era mejor no preocuparme demasiado. Salí del baño, me precipité al lavabo, y moje mi frente y detrás de mi cuello.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 25 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Almas Gemelas [Deavy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora