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Desde que Jungkook dejó la tarjeta de Taehyung en su escritorio, una semana y media había pasado casi sin darse cuenta. El ritmo de sus días lo había absorbido por completo, y la primera tanda de exámenes, prevista para la última semana de septiembre, lo mantenía con la mente ocupada en todo menos en los recuerdos fugaces de aquella fiesta. El rostro de Taehyung, que durante los primeros días lo había desconcertado, ahora se desvanecía entre el estrés de las responsabilidades académicas.

Era miércoles 13 de septiembre, y la biblioteca de la Universidad Yonsei estaba a rebosar de estudiantes que, como él, intentaban aprovechar cada minuto antes de las evaluaciones. Jungkook estaba sentado con sus tres amigas de siempre, Minha, Eunha y Haneul, pero a diferencia de ellas, él estaba sumido en un silencio impenetrable. Mientras las chicas charlaban animadamente, él apenas levantaba la vista de sus libros, fingiendo concentración absoluta en el material de enfermería que debía repasar como estudiante de tercer año.

El ambiente cálido y silencioso de la biblioteca contrastaba con el bullicio de la conversación que tenían sus amigas. Minha y Eunha reían suavemente, intercambiando comentarios sobre temas triviales, mientras Haneul parecía más seria, aunque igual de implicada en la charla. Pero aunque Jungkook aparentaba estar absorto en sus estudios, una parte de él no podía evitar escuchar fragmentos de lo que decían. El tipo de conversaciones que, en el fondo, siempre lograban despertar en él una sensación de vacío, de algo faltante.

—¡Entonces, básicamente, él fue el que te invitó a salir! —dijo Minha, con una sonrisa cómplice que hizo que Eunha asintiera enérgicamente.

—No lo puedo creer, Haneul, pensaba que estabas enfadada con él después de la última vez —agregó Eunha, divertida.

—Sí, pero... no sé, esta vez fue diferente. Se está esforzando. Y bueno, ya sabes, no es fácil encontrar a alguien así —respondió Haneul, con un tono de voz bajo, pero lo suficientemente audible para que Jungkook captara cada palabra.

Jungkook intentó concentrarse en el capítulo sobre farmacología, pero la conversación lo envolvía, como un susurro lejano que resonaba en su mente. La mención de Haneul conociendo a alguien nuevo le provocó una sensación de inquietud. No era envidia, pero había algo en esas palabras que lo hacía sentir un poco fuera de lugar, como si, una vez más, estuviera observando un mundo del cual no formaba parte. En el fondo, sabía que la timidez que lo definía desde siempre, combinada con la ansiedad que lo acompañaba como una sombra, lo habían mantenido al margen de cualquier relación romántica significativa.

Mientras hojeaba las páginas del libro, su mente divagaba. No podía recordar la última vez que alguien se había acercado a él con genuino interés, y no porque no existieran oportunidades, sino porque él mismo solía levantar murallas invisibles, protegiéndose del posible rechazo. Las pocas veces que había sentido atracción por alguien, siempre había sido algo pasajero, manejable. Pero últimamente, y sin razón aparente, había comenzado a sentirse más solo. Esa clase de soledad que no se disipa con la compañía de amigos o las risas compartidas, sino la que se arraiga en lo más profundo, en esos momentos donde el deseo de algo más —de alguien más— empezaba a despertar.

El hecho de que Haneul estuviera conociendo a alguien, que pudiera hablar de ello con tanta naturalidad, lo hacía preguntarse si algún día podría hacer lo mismo. ¿Qué se sentía realmente tener a alguien? ¿No solo alguien con quien compartir una charla ocasional, sino alguien que te viera, que te conociera, que entendiera cada parte de ti sin que tuvieras que decirlo?

Jungkook suspiró bajito, devolviendo su atención al texto. No era el momento para pensar en esas cosas. Los exámenes estaban cerca y necesitaba enfocarse. Sin embargo, mientras escuchaba a Haneul hablar sobre su nueva aventura romántica, no podía evitar una pequeña punzada de añoranza. Tal vez no era tanto el deseo de estar con alguien específico, sino la simple idea de no estar solo en ese aspecto de su vida.

At the Edge of Desire || TaeKook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora