One Shots Fórmula 1

42. Charles Leclerc

Charles acababa de llegar a casa después de haber tenido que ir a Maranello de urgencia por algunos problemas con el auto. Hace una hora más o menos habías vuelto con Pascale y tu hijo de la obra de teatro del pequeño.

-Hola amor- Te acercaste a Charles y le das un tierno beso en los labios.

-Hola hermosa- El sonreía pero se veía agotado, no pensaste mucho de eso ya que habitualmente estaba cansado después de volver de Maranello -¿Y el pequeño?

-Tu mamá está jugando con el en el patio- Le señala.

-Irr a saludarlos y volveré.

-Okay.

Esperaste a que Charles volviera sentada en el sillón de la sala, estabas repasando en tu cabeza la obra de James para poder contárselo a Charles.

-James de ve emocionado aún, no se quiere quitar su traje- Dice Charles y se sienta a tu lado.

-Lo sé, he intentado sacárselo varias veces pero no quiere que lo haga, esta muy feliz por lo que lo dejé estar, lo hizo tan bien Charles- Sonríes orgullosa.

-¿Si?

-Si, ¿te acuerdas que no nos había querido decir que papel le había tocado?- Charles asiente rascando su cabeza, había algo extraño en su mirada pero decidiste ignorarlo.

-Se lo guardó mucho y planeo todo.

-Si, bueno, fue porque tenía el papel protagonico.

-¿Tuvo un rol principal?- Pregunta el sorprendido y tu asientes con una sonrisa.

Después de eso Charles botó un poco de aire y no pudiste evitar pensar si le había pasado algo en Maranello, se veía agotado y no con mucho ánimo.

-Su maestra dice que tiene un talento innato para la actuación- Sonreías.

-Tiene razón, suele ser muy dramático- Charles intenta ingresar una broma pero no parecía con el ánimo para poder hacerlo.

Le mostraste a Charles las fotos de la obra y le prometiste que le mostrarías en video más tarde, su madre aún cuidaba a James en el patio por lo que pensaste que sería bueno hablar con el, si el lo necesitaba.

-Bien cariño, ¿qué pasa?- Charles gira la cabeza para mirarte y duda.

-Nada, todo bien.

-Vamos, te conozco, haz tratado de fingir que todo está bien pero la verdad es que no lo esta, ¿pasó algo en Maranello?

-No, no, todo bien.

-¿Entonces que te tiene así? Te ves molesto.

-Todo esto es demasiado, ya me estoy aburriendo de los llamados inesperados de Maranello.