My Twisted Empress

Capítulo 11: Aren.

—18 soles después... —

Lena despierta sintiendo un fuerte dolor de cabeza, intenta abrir los ojos, pero le pesan demasiado los parpados, así que le lleva varios minutos conseguirlo. Al abrir los ojos su vista está nublada, así que pestañea un par de veces hasta que puede ver correctamente dándose cuenta que está en el área médica.

Al mirar hacia abajo se percata que su vientre está más grande lo cual significa que está a punto de dar a luz, mira hacia el lado derecho donde puede ver a su bebé completamente desarrollado y en la pantalla dice:

Princesa.

Género: Hembra activa.

Gestación: 29 soles.

Así que es como Kara.

Bueno, así no me preocuparé porque esa retorcida asesine a un bebé por faltar al convenio.

Será mejor quedarme más tiempo aquí hasta que nazca.

Sabe que no necesita levantarse pues su cuerpo está siendo alimentado, por esa razón no se siente débil sólo adormecida. Lentamente comienza a mover sus dedos, manos, pies y después de algunos minutos puede levantar el brazo para rascarse la nariz donde siente comezón. Este movimiento activa una alarma y de inmediato ingresan los médicos que lucen tan sorprendidos por verla consciente.

-Majestad, ¿Cómo se siente? — Pregunta el médico principal.

-Un poco adormecida, pero ya puedo moverme mejor-

- ¿Hace cuánto despertó? –

-Hace 10 minutos — Mira como los demás comienzan a examinarla.

- ¿Siente algún malestar? –

-Dolor de cabeza y espalda — Él mira a los demás para que le ayuden con eso — No sabía que habían configurado una alarma, eso es un poco excesivo ¿No lo cree? –

-La Emperatriz ordenó configurarla, ella ya debe saber también que usted ha despertado-

-Ah, que lastima — Exhala — Quería algunos minutos de paz-

Los médicos siguen examinándola y el dolor de cabeza, así como de espalda se desvanecen rápidamente. No dice nada más pues sabe que ellos quieren verla saludable al 100% probablemente para el nacimiento de la princesa, así se queda callada mirando al techo hasta que las puertas se abren mostrando a Kara portando su atuendo negro de siempre con esa capa roja ondeando, seguida de Mon-El quien para su extrañeza se muestra feliz al verla.

-Majestad, me alegra que haya despertado — Mon-El dice, haciéndole reverencia.

-Gracias, Mon-El — Sonríe levemente al decirlo y Kara se interpone para mirarla, así que sólo vira los ojos y regresa su vista al techo.

-Tú sabías que el espécimen te pondría en una suspensión mental, ¿Cierto? –

-Sí te digo que no, no me creerás, así que piensa lo que quieras — Responde sin mirarla.

-Ya que convenientemente despiertas justo antes que mi hija nazca, por supuesto que no te creeré-

-Bien-

Kara cierra con fuerza los puños alertando a todos los presentes a excepción de Lena quien sigue mirando al techo sin preocuparse por su presencia, todavía tiene algunas horas de vida, porque cuando su hija nazca, probablemente la asesine. Con eso en mente, decide mirarla encontrándose con sus ojos azules gélidos que la miran fijamente.

-Estoy segura que quieres asesinarme — Le dice con seriedad — Sí lo harás, ¿Puedes cumplirme una última petición? –

-No mereces mi condescendencia-