Tentación Laboral

Capítulo 10

Pov Jungkook

Abrí un poco los ojos cuando sentí la luz del sol por el ventanal, descubrí a Jimin en mi pecho, anoche se quedó dormido y no pude hablar con él de lo que sucedió entre nosotros, volví a cerrar mis ojos no quería saber si se arrepentía de esto y me daba miedo que lo hiciera, porque yo no lo hacía, sentí como se removió entre mis brazos y me dio un beso y después una mordida tierna en la mandíbula.

— ¿Esto es un sueño? porque si es así no me despiertes — dije con una sonrisa.

— No es un sueño señor Jeon — dijo, abrí mis ojos y ahí estaba con esa sonrisa tan hermosa

— ¿Cómo te sientes? — pregunte, ayer había intentado ser lo más delicado con él, no como el animal que suelo ser.

— Bien, me siento maravilloso, solo esto me incomoda — señaló la venda en su pie haciendo un puchero, no recordaba eso

— Hoy será muy consentido joven Park — me acerque y lo bese, él abrió su boca para darme acceso y enrollo sus brazos en mi cuello

Abrazado, besándonos y riéndonos, juro que esto era un sueño, nunca había sentido esa tranquilidad con alguien, no quería huir, no me incomodaban sus caricias.

— Jungkook, juro que la estoy pasando muy bien, pero debemos ir al restaurante hoy — me dijo y mi burbuja se rompió

— No quiero ir, y si cancelo todo por este viaje y nos quedamos aquí lo que resta — seguí besando su cuello

— Ya — me alejo con una sonrisa — date prisa que también me debo arreglar — estara loco si piensa que irá conmigo y su pie lesionado

— Tu no irás, debes estar en cama por la herida — abrió los ojos sorprendido — no esperabas ir y no poder caminar o ¿lo que quieres es que te cargue? — le dije coqueto

— Claro que no, ya vaya a alistarse y me quedaré trabajando aquí por hoy — sonrió y no pude evitar besarlo

Me metí a bañarme, empecé a recordar lo que pasó anoche, Jimin era un ángel, me encantaba, estaba hechizado y sé perfectamente que regresando a Seúl no podré dejarlo, pero recordé sus palabras "¿Y qué pasaría si me enamoro de usted?", él no se puede enamorar de alguien como yo, merece algo mucho mejor. Terminé de ducharme, la habitación estaba vacía, salí a la cocina y Jimin estaba con mi camisa puesta que lo hacía ver demasiado sexi, no pude evitar abrazarlo por la cintura.

— Oh me asustaste, te prepare café y ya pedí servicio a la habitación — en ese instante tocaron la puerta, abrí y entró un mozo que desde que vio a jimin no le quito los ojos de encima

— Aqui esta su desayuno — dijo sonriéndole a Jimin

— Muchas gracias, que amable — dijo Jimin y yo tosí para que recordara que estaba aquí

Sentí como un sentimiento de enojo e inquietud porque ese chico viera a Jimin vestido de esa forma, me acerque y le entregue un billete para su propina, agradecí y prácticamente lo saque de la suite.

— Fuiste muy grosero, él fue muy amable — dijo con una sonrisa coqueta

— Te estaba comiendo con los ojos — dije con un tono seco

— Bueno, usted me mira de esa forma desde que comencé a trabajar con usted y nadie lo evitó — dijo riendo, me acerque lo suficiente a sus labios

— Pero tu eres mío, a partir de anoche — le di un beso rápido y me dispuse a desayunar.

POV Jimin

Jungkook dijo que soy suyo, desayunamos en silencio, no supe qué responder a eso, porque para ser honesto, si me siento como suyo pero tengo claro que él tiene a su novia y yo solo soy su asistente. Me puse a trabajar en lo poco que faltaba para el lanzamiento, en el transcurso del día fue el doctor Ren a curarme, me comentó que estaba sanando muy rápido y que mañana podría empezar a caminar, me llevaron comida por instrucción de Jungkook, entonces me imaginé que no volvería temprano.

Me dispuse a comer y después pase un par de horas acostado en el sofá de la habitación viendo la ciudad, no note en qué momento me quede dormido, hasta que sentí los brazos de jungkook cargarme estilo nupcial, enrede mis brazos en su cuello y escondí mi cara en su cuellos, deseaba olerlo, intento recostarme pero me aferre a su cuello.

— Por favor, no, déjame disfrutar tu aroma un poco más — dije en un susurro

Sentí como volvió al sofá y se sentó conmigo en brazos, yo disfrutando de su aroma con los ojos cerrado, el me acariciaba la espalda

— Jimin, te puedo pedir algo — me dijo y salí de mi escondite y lo mire, quería besarlo

— Dime — fue un susurro al ver su cara seria, un miedo me recorrió

— No te enamores de mi, por favor — hizo una pausa, mi corazón empezó a martillar con miedo — lo que paso anoche fu... — lo interrumpi y baje de sus piernas

— Lo sé, solo fue por la tensión que existe entre nosotros, me ha quedado claro señor Jeon, me retiro a dormir — cada vez sentía mas las lagrimas y como mi voz estaba apunto de romperse

— Jimin, espera — dijo pero sali y cerre la puerta con fuerza

Sabía que no podía ilusionarme en una noche, pero soy un virgen en esto de las relaciones sin sentimientos, siempre he pensado que cuando te entregas en cuerpo es porque una parte de ti tiene sentimientos por la otra persona, pero soy un tonto, solo yo puedo ilusionarme que esta comprometido y le es infiel a su novia con lo primero que se le atraviesa.

Me metí a mi cama y revise, apenas eran las 8 de la noche, pero no quería ver a jungkook, puede que esté siendo muy dramático, el nunca me prometió nada pero no pude evitar sentirme miserable con su comentario, un rato después de estar mirando el teléfono y llorar en silencio escuche la puerta de la habitación, decidí hacerme el dormido.

— Jimin ¿podemos hablar?— dijo — ¿estás dormido? — pregunto al ver que no había respuesta, ni me movía

Al no recibir mi respuesta escuche, la puerta principal y me percate que se salió, me sentí peor y muy solo en cuando voltee y no lo vi, me enamoré pero no fue por lo de anoche, fue desde el primer momento en que lo vi. No tengo amigos con quien desahogarme, literal volví a ser solo yo. Las lágrimas no paraban de salir hasta que me quedé dormido.

Ya les traigo otro capítulo, así se los ire subiendo antes quería subirles mas de uno, pero les hago esperar mucho. 

Una pequeña discusión entre nuestros protas porque ajaa, espero les este gustando la historia, no olviden sus estrellitas