La noche anterior fue un desastre.
Jimin no había podido dormir nada, luego de que Yoongi lo devolviera a su apartamento y Seokjin se encargara él misma de arroparlo. Su corazón latía con tanta fuerza que solo el ruido de este y aquella frase dicha a la ligera, invadían su mente, agotándolo.
Era inquietante, en verdad, el creer en la posibilidad de que su mejor amigo le haya besado mientras esta estuviera ebria. No solo por el hecho de juzgar sobre si Yoongi sería capaz de hacer aquello o no, sino más bien, de que él tiene pareja.
Una mujer a la cual Jimin respeta. Suficiente tiene con odiar sus deseos, como para creer que, de algún modo, se hicieron reales.
Por lo que, afanado por borrar esas ideas, corre a su primera clase, muy temprano en la mañana. Y tras dos agotadoras horas, Jimin recorre los caminos que dan hacia los jardines del campus, y observa, sin evitarlo, a Lee Taemin, quien sonriente conversa con un grupo de amigos mientras es ignorante de la conmoción de sensaciones que Jimin experimenta, y como todos sus nervios lo paralizan.
Y aunque de cierta manera y con mucha razón, Jimin debería poner todos sus esfuerzos en entender el porqué de sus emociones, y no pretender confundirlos con su desesperada necesidad de huir de sus anhelos. Sobre todo, evitar tener ideas tan creativas como esperar a que Lee Taemin estuviera solo para enfrentarlo.
No obstante, llevaba un buen rato en eso y el momento para acercarse y hablarle, nunca parecía ser el correcto.
Así pues, sólo en las escaleras del jardín, suspiraba una y otra vez, mientras se compadecía de sí mismo, y murmuraba incoherencias.
Anoche había sido un ultimátum. Debía eliminar opciones. Terminar con esta intriga y aceptar la verdad. Cualquiera que sea esta, Jimin estaba decidida en enfrentarse a ella.
Pero era un cobarde, así que empezaría con quien menos temía dar la cara...
—Buenos días.
Aunque eso también le resultara difícil de hacer.
—Estás aquí —dice Jimin, tranquilo, desviando la mirada de Taemin a Seokjin, quien subía las escaleras hasta llegar a él.
—Te traje café.
—Gracias.
—¿Terminaron tus clases?
—Aún no —contesta Jimin con una sonrisa tímida—. Solo vine aquí por un poco de aire.
—¿Cómo va tu mano?
—Está mejor.
—Oír eso me hace feliz —dijo Seokjin dulcemente, mientras le extendía su café—. La verdad es que más que nada estoy aliviado. Siento que perdí años de vida.
Y ante eso, Jimin mira con ojos grandes a su mejor amigo y esconde su sonrisa con el café que se le fue ofrecido, pareciendo muy divertido su riña.
—Lo siento.
—Está bien —susurró Seokjin, rápidamente—. Pero debemos hablar sobre la manera en la que te cuidas a ti mismo.
—No por favor. Agradezco las buenas intenciones y el gran afecto que me tienes, pero no quiero esto... no de ti.
—¡Oh, ya veo! Solo Yoongi puede tomar tales libertades. Entiendo.
—Jin... —comenzó a decir Jimin, inquieto, moviendo su pie en su sitio mientras intentaba no mirar a su mejor amigo a los ojos.
Seokjin, quien no era ignorante de esto, giró hacia la dirección de aquella mirada y sellando sus labios en una media sonrisa, pretendió creer las razones de tal comportamiento por parte de Jimin.
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THAT NIGHT﹁ Myg-Pjm
FanficThat Night toma el contexto de un protagonista fuerte y apasionado, que esconde un amor no correspondido por su mejor amigo de la infancia. Jimin ha estado soltero toda su vida, pero no es tan inocente como su apariencia deja creer a los demás. Y de...