──── Porque los hombres serán amadores de sí mismos, soberbios, sin amor, ingratos, irreverentes, traidores, amadores de los placeres en vez de amadores de Dios chapter fourteen, omnisciente pov
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
─── Donna había estado ansiosa en su interior desde hace varias semanas. A pesar de tratar de ignorarlo, parecía que cada vez le molestaba más. Cada vez que el grupo se reunía y Jenna estaba presente, notaba una pequeña conexión en ella y Nicholas, como si compartieran un pequeño secreto entre ellos. No era solo en la manera que Jenna lo miraba o cómo dejaba comentarios medio broma sobre su pasado, si no el hecho de que Nicholas no hacía nada al respecto. Nicholas solo sonreía y se reía como si nada, como si esas palabras no significaran nada para él.
Durante las últimas semanas, Donna había tratado de convencerse que solo era una idea y que todo estaba en su cabeza. que estaba siendo celosa sin razón. Pero entonces, en una de las últimas reuniones, Jenna lanzó un comentario que encendió su ojo de loca: "Es muy difícil verte siendo feliz cuando fuimos tan buenos juntos". Nicholas no solo se ofendió ni rechazó el comentario, si no que simplemente sonrió incómodo y se encogió de hombros. Como si fuera un chiste, como si las palabras de Jenna no fueran un recordatorio hiriente.
Estas situaciones se habían repetido de varias maneras: indirectas, sonrisas, bromas del pasado. Donna había tratado de tragarse sus preguntas, no quería parecer insegura que se sentía amenazada por Jenna. Pero cada vez que Jenna hablaba, se sentía invisible, como si Nicholas no pudiera salir de su nostalgia. Y lo más doloroso es que sus amigos lo permitían, que todos actuaban como si ese comportamiento fuera normal.
Los dos estaban solos en el departamento, Donna sentía que ya necesitaba decirlo y no quedarse callada. Se sentía muy confundida y frustrada, necesitaba las respuestas. Miro a su novio, quien estaba sentando en el sofá, viendo su teléfono, y decidió que era el momento.
—Nick, tengo que preguntarte algo— llamó su atención Donna con una voz calmada— ¿Qué está pasando o qué pasó entre tú y Jenna? Porque últimamente he notado que hay algo raro cada vez que ella está
Nicholas levantó la mirada, sorprendido de lo directa y seria que fue Donna. Sabía que esta conversación llegaría tarde o temprano, pero no estaba preparado.
—¿Raro? ¿A qué te refieres?— respondió, tratando de sonar casual mientras se acomodaba incómodo en el sofá
—No finjas que no sabes, Nicholas— replicó, frunciendo el ceño— Los comentarios que hace Jenna cuando estamos juntos, esas bromas de que tenían algo antes. Y lo peor es que solo te ríes, como si no te importa
Nicholas sintió el calor subirle a su rostro, no esperaba que Donna fuera directa, y la culpa comenzó a invadirlo.
—Es solo Jenna siendo Jenna, no lo está diciendo en serio, solo está jugando— dijo Nicholas con una sonrisa nerviosa que esperaba que se tranquilizara la situación
