El sol se escabulló por la ventana y se desparramó en el suelo de la habitación. La calidez de su intensidad se extendió en el ambiente, provocando que el humano del puma se removiera sobre su lugar sin embargo, sus piernas estaban atrapadas por otras un poco más delgadas. Su posición boca arriba le facilitó mirar aquello y luego miró el rostro del castaño que tenía recargada la mejilla en su hombro. No estaban abrazados, pero estaban demasiado juntos como un par de sardinas.

Su puma se alborotó feliz dentro de su pecho y un sentimiento de alivio lo atrapó. La noche anterior había hablado con Jeongin sobre la intervención de Bang para el desprendimiento del humano y el lobo. Yang le advirtió que el lobo se volvería salvaje y peligroso con el tiempo debido a la conexión quebrada con el razonamiento de su parte humana. Minho naturalmente sintió una esperanza vívida por ver la derrota de su enemigo sin embargo, el lazo de compañerismo que habían roto, comenzó a doler luego de un rato pensando sobre ello. Trató de convencer al lobo toda la noche anterior y ahora finalmente vio los frutos de su intervención.

Escuchó el suspiro ajeno y luego el movimiento de sus piernas que le dejaron saber que el otro había despertado. Miró de nuevo al rostro ajeno y sus pupilas se encontraron en colores brillantes. Lobo y puma se sintieron cómodos dentro de sus pechos, principalmente por el baño de aroma que había recibido el puma en esos días. Aún así, resultó una explosión de sentimientos encontrados para los dos humanos.

---Bienvenido de vuelta ---murmuró el mayor.

Seungmin parpadeó adormilado. Desenredó sus piernas de las ajenas y se sentó sobre su lugar, mostrándose confundido y evidentemente conmocionado por la cercanía del puma. Sabía que había entrado en celo y que había perdido el control de su lobo, pero mirarse a sí mismo desnudo con el puma a su lado, era definitivamente desconcertante. Su pecho se oprimió y la idea de una infidelidad lo atormentó, porque sus sentimientos por su destinado aún eran fuertes.

---Ponte esto, hace frío.

Minho le pasó un camisón y lo cubrió, sintiendo la tensión en el otro que le miraba con el ceño fruncido. Su puma le estaba pidiendo abrazarlo para reconfortarlo, pero el humano se negó porque entendió que Seungmin estaba peleando por entender lo que había sucedido.

---No me mires así, tu lobo y mi puma no se aparearon, no fue lo que desearon estos días.

Seungmin asintió cohibido. Un sentimiento provocado por viejos recuerdos le presionó el pecho y tomó el brazo de Minho para revisarlo. El otro se dejó hacer con la duda en el rostro por la preocupación ajena, y el aroma a limón que había sido agrio, bajó su intensidad cuando no vio marcas en el otro.

---¿Qué buscas?

---Creí que te había herido.

El puma se alborotó al escuchar la voz de Seungmin otra vez. Minho lo ignoró y se sentó con cuidado en la cama, acercándose al castaño para encerrarlos en una burbuja íntima que pudiera darle un poco de seguridad ante su lazo de compañerismo renovado.

---¿Por qué lo harías?

---Mi lobo no sabe controlarse ---murmuró, frunciendo el ceño cuando pareció recordar algo más---. Yo... No supe controlarlo en su momento... Me sentí preocupado pensando que probablemente te había herido también... Lo siento.

Minho escuchó con atención. La tonada del castaño sonó decaída y sus ojos no dejaban de posarse en sus uñas y brazos como si buscara algo. El azabache recordó que antes de la tragedia, Jisung le mostró los brazos llenos de cicatrices y sintió el pellizco de un escalofrío cuando recordó la agresividad de su pelea. El lobo era verdaderamente peligroso y si casi logró amputarle la mano con un mordisco, no quería ni pensar en lo que tuvo que vivir Jisung para que su piel no sanara por completo.

OUR DESTINY [2MIN / KNOWMIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora