𝓑𝓵𝓾𝓮 𝓗𝓸𝓾𝓻 | kongzilla [Godzilla x Kong]

6- Aprender

"No me lo puedo creer..."

Pinzudas patas delanteras de la polilla presionaban con dureza la cabeza de Godzilla. Una forma de castigo, o una forma de mantener el equilibrio mientras el lagarto continuaba flotando en medio del lago. Decidió simplemente flotar, no quería continuar nadando y salpicar accidentalmente a la pequeña reina que reposaba en su gran cabeza y cuello. Ella definitivamente le pincharía por ello, y un gilpe era lo último que necesitaba Godzilla ese día.

"¡Estás celoso!" Declaró ella después de repasar una y otra vez, perpleja, el relato de Godzilla.

Godzilla se explicó lo mejor que pudo. Sin embargo, cuanto más pensaba en su relato más estúpido se sentía. Por suerte Mothra le conocía a la perfección, y sabía sus más profundos pensamientos incluso con vagas explicaciones.

"¿Celoso?..."

A pesar de que Mothra tenía toda la razón, lo cierto es que Godzilla no iba a aceptar directamente un concepto tan lejano para él como los celos. Eso era cosa de niños, él era perfectamente capaz de controlar sus emociones y pequeños pensamientos posesivos sobre sus seres queridos...

¿verdad?

Godzilla resopló. Un chapoteo causado por el resoplido ahuyentó a los pececillos.

"No, no estoy celoso, Mothra..."

"Lo estás."

"No-¡AH!"

Un gruñido de dolor salió de su garganta al notar la fría pata de Mothra golpearle con la filosa punta en la cabeza. Un pinchazo rápido pero efectivo, la polilla solía hacer lo mismo con él cuando Godzilla era un cachorro.

"Lo estás" Repitió la polilla. "Gojira, está bien, en serio, no te avergüences."

"Yo..." Una pequeña mueca triste en su cara. "Me siento mal, Mosu..."

La polilla suspiró, cerró sus ojos azules por un momento, pensando. "Todo el mundo tiene celos a veces, ¿sabes?" Volvió a abrir sus ojos, cambió de posición, ahora sentándose y dejando que sus gigantescas alasacariciaran el agua. "Pero sabes que él te quiere a tí, Goji."

El rey de los monstruos ocultó su hocico en el agua, debía aprender a controlar sus celos. Él era un gran guerrero, ¿Qué sería una pequeña batalla más contra sus sentimientos? Nada.

"¿Y qué hago ahora?" Preguntó el lagarto. "¿Vuelvo con él?... estará ocupado..."

Mothra rió disimuladamente. "Gojira, tú deberías estar ocupado todo el día. ¿Te recuerdo quién está vigilando más la superficie para que puedas darte a tí mismo unas vacaciones desde que estás con Kong?" Godzilla no pudo evitar sonreír.

La polilla le estaba ayudando mucho. Suponía Godzilla, era porque verle feliz después de tantos ciclos le hacía feliz a ella.

"No estará ocupado para tí, Gojira, créeme." Mothra gorgojeó suavemente, bajando la cabeza para hacer contacto visual con los ojos dorados del rey.

Godzilla sintió lentamente sus celos desaparecer.

"¿Un último baño?" Preguntó el rey de los monstruos en un tono juguetón, y antes de que la reina pudiera responder se sumergió en el agua, empapando a Mothra, quién gracias a sus rápidos reflejos dió un fuerte aleteo para evitar hundirse.

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Kong alzó una ceja completamente confundido, mirando a Shimo perplejo. "¿Celos?" El simio parpadeó. La lagarta blanca asintió lentamente.