"If You Want Me"

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POV-Nate

Nathan Keller escucha los jadeos flebiles de esa linda desconocida mientras sus manos corren por su piel de luna, esa piel tan suave que le proporciona un placer extremo mimar.

Vuelca otro aceite sobre su pecho cubierto apenas por ese top blanco sin tirantes que se hace transparente en un santiamén y con toda la profesionalidad que lo distingue lo esparce con mucho cuidado, rodea sus curvas acercándose siempre de más, en fin amasa sus pechos con estudiada lentitud, son pequeños pero se veen tan perfectos y sus pezones que se entreven por el tejido son dos botones duros deseosos de sus atenciones, los captura entre sus dedos y juega con ellos.

La pelirubia se arquea, es tan sensible, tan receptiva aunque parece tan sorprendida ella misma por sus reacciones, está claro que si esa linda chica se encuentra allí es porque quiere cuidados especiales... como todas esas mujeres y todos esos hombres de alta sociedad que recurren a "los servicios extras" del Hotel, pero es la primera vez que la ve ahí, de lo contrario se acordaría seguramente de una persona tan singular.

Ya desde la primera vez que la había notado en la recepción se había quedado embobado mirándola, estaba hablando con Jason revisando juntos la lista de sus citas de trabajo cuando esa chica había capturado su atención, tenía unos rasgos perfectos mortificados detrás esas enormes gafas de solterona, su apariencia era tan torpe, su flaca silueta era escondida bajo esa ropa demasiado anónima... estaba muy curioso por saber que hacía en ese sitio una chica como ella, distraídamente la rubia se había girado en su dirección y sus grandes y felinos ojos pardos habían despertado una curiosidad más morbida, sin poder controlarse se había acercado y cuando había chocado contra su torso casi había explotado en una ruidosa carcajada por su expresión, ni siquiera lo había mirado en la cara y eso le había dolido, no estaba acostumbrado a ser ignorado sobre todo por el universo femenino... viéndola desaparecer dentro del ascensor sabía que ese encuentro no podía acabar de esa manera.

Más tarde había preguntado por esa clienta tan particular a Kimberly la recepcionista que le había dicho su nombre... Shang Mei... un nombre inusual por su apariencia poco asiática a excepción de esos ojos gatunos y que probablemente era falso, estaba en la lista de las citas de masajes especiales de Koji, así en un arranque de impulsividad había pedido de cambiar una de sus clientes con esa chica.

Kimberly siendo amiga suya le había hecho esa pequeña cortesia, además tenía necesidad que le hiciera ese favor porque la Señora Masterson, que es una de las clientes más ricas y más antiguas del Resort, se está dejando llevar por sentimientos demasiado personales y cuando eso pasa sea él que los demás están obligados a cortar inmediatamente cada relacion con quienquiera.

Son masajistas profesionales, su tarea es únicamente satisfacer las necesidades de lo clientes sin empujarse más allá de lo requerido, de lo contrario Mr Grady en los mejores de los casos los despidería.

Él es uno de los mejores, nunca se ha dejado llevar por deseos personales... esto es solamente su trabajo y le gusta, le gusta regalar la felicidad que a menudo esas mujeres no encuentran con sus parejas en sus vidas.

Además gana mucho y es lo que le sirve para pagar los estudios musicales de su hermanita, Sarah quiere volverse una cantante lírica y quiere estudiar en Italia, en Florencia, pero ese sueño requiere mucho dinero.

Desde que se han quedado solos sin sus padres, que habían muerto en un accidente de coche, ha hecho de todo para criarla como mejor pudo, tiene la responsabilidad de hacer por ella todo lo que habrían hechos sus padres, todo lo que le habían prometido a su hija menor antes de fallecer.