Lo último que recordó fue los gritos y las plegarias de alguien a lo lejos, jamás pensó que algo así pudiera afectarle tanto. No tenía sentido, era ilógico.
–Duxo
Volteo a ver a su costado encontrándose con la mirada preocupada de ambos castaños aunque su atención se fijo en otra cosa.
La mano de Juan se encontraba vendada y con rastros de sangre fresca...
–¿Qué...?
Pregunto al aire, esta confundido no sabia cuanto tiempo había pasado desde que de fue a dormir tampoco cuanto tiempo pasó desde que su amigo haya sido lastimado, se sentía... estaba asustado.
–Que bueno que despiertas... Pensé que ya te habías ido con el chamuco...
Hablo con cautela Juan mientras ayuda a que se sentía derecho a la par que veía como Luzu sostenía un plato con comida.
–Yo...
–Tranquilo, han pasado 12 horas desde que te acostaste y 25 minutos desde que la herida de Juan a comenzado a sanar. No fue tu culpa, fue un reflejo para protegerte
Luzu lo observo como si tratara de saber que otra duda tenia, pero simplemente acerco el plato de comida para que comiera.
–Además no fue para tanto... Solo fue un rasguño mira
Acerco su mano y levanto con cuidado la gasa revelando qué no era solo un "rasguño" si no que Dios sabe con que había logrado perforar la palma de la mano viendo como los tejidos comenzaban a cerrarse rápido pero igualmente lento.
Casi vomita, no era muy fan de la sangre y menos de ver algo como eso.
–¡Puta!
Sin previo aviso tras ver la cara de asco del azabache, el mayor aplastó la palma "ventada" causando un leve sangrando.
–¡Care' verga triple hiju 'eputa!
Se sostuvo la mano con cuidado. Ante esto Luzu puso los ojos en blanco y Duxo soltó una risilla.
—♤—
–Bien...¿Qué íbamos hacer?
Se encontraban reunidos en el "centro".
La mitad había sido convocada no tenían ni idea de que estaba sucediendo y hasta cierto punto no les importaba.
–Vamos a ver si podemos traer de vuelta a Duxo y Aquino con este libro
Intervino una clase de copia de pikachu o Soaring, como quieras llamarle. Este sostenía un libro viejo con bordes de lo que parecía oro, decorado con amatistas y diamantes.
—Pero para que, seguramente están en algún lugar agarrándose a besos o cachando como conejos. Volverán en un rato
Cruzándose de brazos Estalius se alzó de hombros mientras se apoyaba en Lucasta.
–Opinaría lo mismo que tú, pero ya han pasado varios días... y ni Capicuy saben donde esta
Esta vez hablo Locochon abrazando o (como el le había aclarado) "cubriendo" del frío a C3jo.
–Bueno dejémonos de palabras y comencemos de una vez...
—◇—
—Ey...pibe
Su mirada se encontró con la vacía del menor.
—Uhm...?
Fue la única respuesta que tuvo, el castaño se notaba cansado y su piel clara se encontraba era de pálido enfermizo.
—Traga un poco, no has comino...nada
—Oh....
Y así siguieron en silencio, Mariana, quien los veía de lejos solo suspiro. De lo poco que pudo hablar con el castaño se le ocurrió talvez hacer su plato favorito, no tenia ni idea de gastronomía peruana pero se aseguraría de hacer el mejor Ají de Pollo que existiera.
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•Los Ayudantes Del Alcalde• Corrigiendo
FanfictionTodo fue una bomba tras otra, nadie sabía cómo aquellos chicos habían llegado al pueblo ni como se habían ganando la confianza del alcalde. Ni siquiera porque estaban ahí...