A New Zing Rising (DennisxWinnie)

Capítulo 9 : "La nueva"

Todo el grupo de murciélagoides gigantes iba muy aprisa por el cielo, no queriendo poner a prueba la paciencia de Bela. Las órdenes habían sido claras como el agua. "Vuelvan al bosque y den aviso a los vigías para que se deshagan de los cuidadores. Se acerca la hora y necesitaré al muchacho aquí para el ritual. Si hacen bien las cosas no habrá que tener resistencia pero si llega a ello, no duden en hacer lo que haga falta. No lo necesito entero, pero lo necesito en menos de un mes". Así que estaban todos forzando sus alas hasta casi consumirlas, ignorando la voz que decía que el jefe estaría furioso cuando oyera que el chico se les había escapado. Si, su tamaño de insecto no ayudaba a intimidar y su vocecita afinada, menos; pero aún le guardaban el respeto al que estaban obligados obedeciendo como esclavos. Era su amo, después de todo.
El bosque neblinoso que rodeaba el hotel de repente cambió en un paisaje muerto con nada más que árboles secos y esqueletos de animales desperdigados por aquí y por allá. Bastante deprimente, a decir la verdad, pero no significaba nada para criaturas corrompidas como éstas. Media hora después, una cordillera sombría apareció ante ellos y aceleraron aún más, mirando alrededor para avistar la cueva. Entre esas masas gigantes de roca vieron un hoyo difícilmente distinguible y se inclinaron para aterrizar dentro. Tan pronto como el último apoyó las garras en la roca, se escuchó una voz de timbre alto como ardilla pero autoritaria que atravesó el aire frío:

-¡Al fin llegaron, pila de imbéciles!¡Más les vale que hayan cumplido la tarea o les va a pesar!-.

Dos o tres se cubrieron la boca con las manos para prevenir las carcajadas; conscientes de cuan cara saldría esa falta de respeto. El que parecía estar a cargo del grupo dio un paso al frente dubitativo y mantuvo la vista en sus pies.

-¿Y, Billy? No sé qué tanto miras al piso si el mestizo no está ahí. Pero...¿donde sí está?-.
-Bueno señor, verá. Llegamos al fin a la cabaña y espiamos para cerciorarnos de que estuviera adentro, pero no lo estaba. Interrogamos a los humanos y dijeron que había salido a cazar como siempre así que los atamos y pusimos como cebo para él. Teníamos el cable trampa y el gas listo para dormirlo y todo. En eso oímos que venía llegando y se detuvo en la entrada por alguna razón. Habríamos esperado un poco más para asegurarlo pero éste idiota - agregó ojeando con furia al secuaz a su derecha - se quiso apresurar y se tropezó con todo causando que...-.
-¡¿Causando qué?!- gritó la voz con clara rabia.

Lentamente vino volando un pequeño murciélago acompañado de dos tamaño normal (si es que así se le puede decir), que en un segundo agarraron a Billy y lo presionaron contra el piso. Cuando alzó los ojos, vio a Bela apretando los puñecitos.

-¿Más cómodo ahora? En fin, no me importa, pero preguntaré de nuevo¿ Causando. Qué?-.

-Como decía, Renfield - continuó, eligiendo sus palabras con cuidado - se tropezó con todo y el gas cayó en la fogata y estalló todo. Apenas escapamos de la explosión,  y también el muchacho. No podía entender cómo hasta que lo vi correr acompañado por una chica lobo vestida de rosa. Ella debe haberlo detenido asegurando que no entrara a tiempo en primer lugar. Los perseguimos por dos horas pero de repente borraron su rastro, no sé cómo,  y los perdimos -.

Ahora Bela estaba en serio enojado; tanto que la palabra "ira" no lo comprendería. Si los ojos son la puerta del alma, la suya no era más que humo rojo y venas hinchadas.

-Por favor, dime que luego los encontraste y atrapaste. Dime que un niño debilucho que dice "porpe" no logró evadirte y llegar al - procedió a escupir al piso al decirlo - hotel ¡Dime!-.

Antes que el pobre miserable pudiera decir otra palabra, se escuchó aleteo desde fuera de la cueva y otro más de ellos llegó jadeando y gritando:
-¡Jefe, jefe, nunca va a creer lo que vi en el hotel!-.
-¿Y qué haces tú aquí? Te dije que te quedaras allá y te reportaras únicamente cuando enviásemos a alguien para relevarte. Debemos mantener vigilancia constante sobre esos traidores a la monstruosidad - dijo con pasiva agresividad - Como no sea algo importante, lo que vigilaras serán tus tripas saliendo frente a tus ojos, Blödh -.
-El mestizo llegó allí, y no parece que esté aún bloqueado como lo dejamos. Aparentemente recuperó sus memorias de alguna forma -.