Capítulo 5: "Comité de bienvenida"

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Los dos se quedaron congelados en el lugar, sin atreverse a enfrentar a quien acababa de reconocer a la lobuna. La más afectada aparentemente era Winnie, a quien la mera posibilidad de que fuera el que ella creía que era le impedía mover siquiera un músculo. Dennis, en cambio, no tenía la más pálida idea de quién podía ser aquel desconocido; que ahora estaba yendo hacia ellos. Pasaron unos terribles dos segundos hasta que ella sintiera un mano peluda posarse pesadamente sobre su hombro y forzándola a darse vuelta.

-Nunca creí que fuera a hallarte aquí-.

Entonces Winnie soltó un sollozo, y Dennis giró preparado para golpear al otro en la cara; en caso de que estuviera dañando a su nueva amiga. Grande fue su sorpresa al ver a Winnie abrazando a una alta figura encapuchada que le palmeaba la espalda gentilmente.

-Al fin estás aquí. Te extrañé muchísimo...como todos los demás lo hicieron. Especialmente mamá y papá- dijo la figura en un bajo tono quebradizo de voz, tratando de contener el llanto que se le subía a la garganta - Estoy tan agradecido, hermanita...-.

Los ojos de Dennis se abrieron como platos al escuchar esa última oración, y exclamó:
-¡¿Hermanita?!-.
El ruido de su voz alertó al extraño, quien volteó a verlo. Su rostro era bastante parecido al de Winnie, y vestía una remera de verde oscuro con el estampado de una telaraña en ella. Lo que sí marcaba un contrate era la diferencia de estatura que mantenían: a ella le llevaba alrededor de una cabeza, o una cabeza y media. 

-¿De..Dennis? ¿Eres...eres tú? Pues..eh...¿cómo..?- su atención pasó a ella otra vez - ¿Qué hiciste exactamente? ¿Dónde lo encontraste? ¿Alguien más sabe de..? -.

-Wow, calmado Wil. Hablaremos acerca de eso luego en el hotel, así que ahora sólo concentrémonos en llegar allá, ¿okay? - le contestó la chica-lobo luego se secarse la cara con la manga de la campera.

La mente del muchacho se encontraba por entonces a un paso de estallar  por todas las dudas que le habían surgido con la aparición de ése otro; sumadas a las que ya tenía desde que se había encontrado a Winnie y aún no habían recibido una respuesta válida. Si, había tenido un vívido sueño que se condecía con todo lo que ella le había relatado; pero ¿era eso prueba suficiente de que la historia era verdadera? No, para él no lo era del todo.  Tenía la extraña sensación de que, de alguna manera, entendía cada cosa a la que se referían y al mismo tiempo; no entendía ni jota. Así que un poco se sentía medio fuera de la conversación. Fuera de la conversación, y de todo o demás. ¿Cómo era posible que mientras su pasado se había tornado repentinamente misterioso para él, otros parecían saber cada detalle?

-¿Y quién se supone que eres tú? ¿Cómo sabes mi nombre? - le preguntó con clara molestia.

El tal Wil le dirigió una mirada un tanto sorprendida, como no entendiendo porque decía lo que decía. Se veía como si la pregunta lo hubiera tomado por sorpresa. En vez de responderle a él miró de nuevo a su hermana y señalándolo le susurró algo que no distinguió con claridad.

-Ya hasta parece que todo el mundo sabe más de mi que yo mismo. Ya se pasan. Por sino se dieron cuenta, sigo aquí. No hay necesidad de fingir -.

-Bueno, ya estuvo. Ahora ustedes dos pongan sus traseros en marcha y vayámonos de aquí de una vez - les dijo ella, divertida con la cara que ponía Dennis - Aunque ya estemos aquí, no sería prudente permanecer en un lugar tan...emmm...abierto. ¿Quién no les dice que esas basuras con alas deciden aparecerse otra vez? -.

-¿¿¿Que quienes se van a aparecer otra vez???-.

La lobuna le hizo ademán a su hermano de que no importaba, para luego indicarles a ambos que la siguiera al exterior de la estación. Una vez que estuvieron afuera, comenzaron a olfatear el aire mientras se dirigían hacia el perímetro de la ciudad. 

A New Zing Rising (DennisxWinnie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora