LOS GEMELOS: ◆THE MAXIMOFF◆

Desilusión Gimnasio (18)

Perspectiva de Wanda.

- ¡Vamos Wanda!-Exclamó enérgicamente mi gemelo.

- ¿Qué?-Talle mis ojos.

- ¡Hoy nos toca deportes! ¡Vamos, no quiero llegar tarde!

- ¿Qué hora es...?

- Las 7:05.

- Pero Pietro, las clases comienzan a las 8:00 y debemos tomar desayuno a las 7:30...¿no crees que estamos un poco temprano?

- Pero hermana, tu siempre dices que hay que ser puntuales y no queremos que se repita lo de ayer.

- Si, tienes razón.-Suspire y me sente en la cama para sentarme y luego levantarme.

- ¡Genial! Muchas gracias.

- Si, si...-Baje las escaleras y me dirigí a los baños, como era temprano, estaba casi vacío, por lo que encontré una ducha con facilidad.
Me puse nuevamente la pijama para subir las escaleras.
No me gusta el deporte, bueno, la verdad es que es divertido los juegos y eso, pero no soy una gran fan como Pietro, levantarme tan temprano lo hago por el, todo por mi hermano. Anhelaba tanto este momento, verlo así me hace recordar su cara de felicidad cada vez que metía un punto, gol, saltaba una valla con facilidad o ganaba una carrera en las olimpiadas.

- ¡Vistete Wanda!-Se cubrió los ojos.- ¡No veo, lo juro!

- De acuerdo.-Tome un buso blanco, zapatillas blancas y una polera amarilla con un poleron burdeo de rayas negras a los lados.

- ¿Listo?

- Si.

- Bien.-Tomó mi mano y bajamos las escaleras rápidamente.
Hicimos la fila para nuestro desayuno, la señora estaba extrañada de haber bajado tan temprano. 7:20, entre comillas. Pero comenzaban a servir a partir de las 7:30, por lo tanto debimos esperar.

- Huevo, rico, sano y nutritivo.-Dijo mi hermano a medida que nos sentabamos en la mesa.- Acompañado de un buen vaso de leche tibia y tostadas, ¿no te parece espectacular?

- Si...

- ¿Coincidencia? No lo creo.

- Tienes razón...-Revolvía con mi tenedor los huevos revueltos. En ese instante Pietro puso su mano encima de la mia.

- Gracias pequeña.-Me miró con sus bellos ojos "celestes-verdes".- Se que no es tu fuerte y todo esto lo haces por mi. No soy tonto, pero gracias.

- No te preocupes.-Sonreí.
Luego llegaron los demás niños y la cafetería se lleno. Desayunamos más tranquilos ya que conseguí relajar un poco a Pietro.

- ¿Crees que tengan un gran gimnasio?-Preguntaba impaciente mi gemelo.- Algo bueno debe tener esta basura, sin embargo, no dejare que se me arruine el día.

- No lo se...-Me encogí de hombros.
Mi hermano pasaba por todas las bancas para luego bajar de un salto y reiterar.

- ¿Dónde está el gimnasio?-Frunció su ceño ya desconcertado.

- ¿Y si le preguntamos a alguien?

- ¡Ya se! ¿Y si le preguntamos a alguien?

- Claro, muy buena idea.-Me cruce de brazos y rodee los ojos.

- Es broma.-Río.- Si te escuche.

- Ahí.-Señale a un chico mayor que nosotros.

- ¿Quien le pregunta?

- Tu.

- ¿Por qué yo?

- Porque tu eres el que quiere saber donde esta.

- Está bien.-Bajo del asiento y troto hacia el.- Hola, disculpa.

- Hola, ¿qué pasa?

- ¿Me podrías decir donde se encuentra el gimnasio?

- Ah, si, claro, ¿son nuevos no?

- Si.

- Bueno, deben seguir derecho, a la izquierda.

- Gracias.

- No hay de que.
Nos alejamos de el y trotamos ya que según mi hermano, "se nos estaba haciendo tarde".

- Y aquí es...-Entró muy feliz por la puerta, pero pude ver como su expresión cambio al ver un muy pobre gimnasio.- Oh...-Artículo en un tono decepcionado.- Bueno...¿qué más podría haber esperado de un lugar como este...?

- Descuida.-Me acerqué.- De todos modos se puede practicar deportes, ¿no?

- Supongo...es solo que...ya sabes, espere un mejor lugar. Algo parecido a nuestra antigua escuela.

- Mh...lo siento.

- ¿Moraleja? No hacerce ilusiones con este sitio.-Se cruzo de brazos y bajo la mirada.

- Tranquilo.
En ese momento llegaron otros muchachos, entre ellos, Thomas.

- Hola Thomas.-Le salude.

- Oh, ho-hola...

- ¿Cómo estás?

- Bi-bien...gracias, ¿Qué le-le sucede a Pi-Pietro?

- Una desilusión por parte del gimasio.-Suspire.

- Ah, con que-que ya vieron nuestro gim-gimnasio...

- Si.

- Es horrible.-Murmuró mi hermano.

- Lo-lo se...pero es to-todo lo que te-tenemos.