Pensamientos de una adolescente

❁ 𝐒𝐮𝐢𝐜𝐢𝐝𝐢𝐨 ❁

Difícil, es una palabra que bien puede quedarse corta para lo que realmente quiero referirme, ha sido más que complejo encontrar el modo, momento y lugar para tratar de expresar lo que por mucho tiempo he intentado abordar. Y no es que no quisiera o intentara escribir sobre ello, lo hice. Sin embargo, cada palabra que escribía al respecto se sentía vacía y carente de fundamento. Estuve mucho tiempo pensando si debía o no escribir sobre esto, y estuve mucho más tiempo buscando la forma de hacerlo. 

Y no se necesita ser adivino para saber que tarde muchísimo más tiempo del que tenía planeado.

La inspiración, suele llegar a mí y es sencillo dejarme ir a través de las letras, soltar todo me hace sentir mejor y más libre. Por lo general, no planeo sobre qué o quién voy a escribir, solo sucede, y para mí, es casi mágico. No obstante, a veces me propongo escribir sobre un tema en específico y cambia toda mi dinámica, son temas importantes y al ser de ese modo no puedo hablar sin fundamentos, doy mi opinión, sí, escribo sobre mi experiencia, también, pero del mismo modo debo recabar información que respalde el ochenta por ciento de lo que digo, si no es que más. Y hasta ahora, en esta travesía que ha sido crear una serie de vivencias, pensamientos y letras, puedo contar con los dedos de una mano la cantidad de veces que he planeado escribir sobre algo en concreto. 

Estuve más de un año tratando de empezar y no tenía más que el título, bastante frustrante y, fue casi doloroso tener tantas ideas sobre el tema y simplemente no poder plasmarlas correctamente. Ha sido casi irrealizable, pero finalmente pienso que he alcanzado mi intención y deseo.

Una de cada cien muertes en el mundo son a causa del suicidio, una de las principales causas a nivel mundial, es la cuarta si queremos ser más exactos. Es la primera en adolescentes y jóvenes. Es una de las que produce más decesos en el mundo y sinceramente, me ofende que no hablemos de esto. Es indignante y estúpido que no se le dé la atención que merece, que consciente o quizá inconscientemente hagamos oídos sordos a la situación, que se pase por alto y que sólo se le preste atención sí y solo sí sucede en nuestro entorno.

Es bastante triste que las personas no lo tomen en cuenta sino hasta que sucede y es muy tarde para hacer algo, es triste porque de prestarle atención a las señales probablemente se podrían prevenir muchos de ellos. Es triste que como seres humanos no sintamos la suficiente empatía, tal vez, para hacer algo al respecto. Bastante vergonzoso que hoy, en este siglo y está sociedad se valore tan poco la salud mental, es indignante como se minimiza y se deja de lado.

Es doloroso como tantas personas que necesitan ayuda no pueden tenerla y como tanta gente que busca ayuda no puede encontrarla.

¿Y si buscas ayuda y te es negada? ¿Y si necesitas ayuda, sin saber, sin entender, y de igual forma, se te arrebata? La desesperanza es algo que cala hondo en tu conciencia, que poco a poco se adueña de todo lo que la rodea, y la desesperanza no suele traer cosas buenas.

Y no es que suceda de la nada, o porque sí, suele pasar por una combinación de sentimientos, de emociones, de experiencias. Sucede por tristezas, dolor y pérdidas, por maltrato o malas vivencias. Hay muchas cosas que desencadenan un suicidio y también muchos medios para prevenirlo, hay muchas campañas en contra del mismo, muchas fundaciones o movimientos, pero si las personas no se interesan, no lo visibilizan ¿como pretendemos hacer un cambio?

Es maravilloso que muchas personas no pasen por ello, por todo lo feo que te lleva a pensar en acabar con tu vida. Pero qué pasa con los que sí lo piensan, que sí lo consideran ¿dónde está esa ayuda que tanto se promete? Miles de personas mueren cada día por suicidio y aún así, no parece haber un cambio.

El suicidio, como muchos erróneamente creen, no es un acto cobarde, a decir verdad quienes lo consideran son personas en demasía valientes que han soportado situación tras situación, hasta que la misma, evidentemente, se vuelve insostenible haciendo que los envuelva la desesperanza. Desesperanza que combinada con pensamientos intrusivos no trae nada bueno y, hay quienes pueden salir adelante, llega a ser solo un pensamiento y no escala por sobre eso. Sin embargo, hay quienes no, muchos de ellos no lo dejan como un pensamiento solamente, es considerado con tal fuerza que sin darte cuenta se vuelve la salida a todos tus problemas.

¿Y cómo evitarlo? ¿Cómo desviarlo? ¿Cómo cambiar una idea que ya está está ti? Que sin quererlo se vuelve tu seguro porque si todo sale mal, esa es tu salida ¿cómo no pensarlo?

¿Cómo salvarte? ¿Cómo superarlo? Tanta concientización, tanto trabajo y tan pocos resultados.

Tantas vidas fugaces. Tantos sueños rotos.

Es una de las mayores causas de muerte en el mundo y aún así, seguimos sin prestarle ni por asumo la atención que por su gravedad exige. 

Necesitamos que se tomen cartas en el asunto, necesitamos ayuda para ayudar y ser ayudados. Y por lo más, necesitamos un cambio de perspectiva y así, un cambio que todos, sin saber, precisamos.

~By Flor Suárez.