La mañana siguiente llegó con aire fresco y renovado. Xiao Zhan despertó sintiendo el calor del cuerpo de Wang Yibo a su lado. Estaba en ese estado entre la vigilia y el sueño, donde la realidad y los sueños se mezclaban, y todo parecía más simple, más fácil de manejar. Xiao Zhan sonrió para sí mismo, sabiendo que la noche anterior había sido un paso significativo en su relación. A pesar de la incertidumbre inicial, todo había resultado más hermoso y profundo de lo que jamás habría imaginado.
Wang Yibo comenzó a moverse a su lado, y Xiao Zhan sintió la suave presión de un beso en su frente antes de que él murmurara un somnoliento -Buenos días.
-Buenos días, respondió Xiao Zhan, con una voz que aún llevaba el eco del sueño.
- ¿Cómo te sientes hoy? Wang Yibo preguntó, su preocupación habitual asomándose incluso en los momentos más tranquilos.
Xiao Zhan se tomó un momento para pensar antes de responder. -Me siento... bien, mejor que bien, de hecho. Anoche fue increíble. Gracias por todo, Yibo. Sé que esto es nuevo para ambos, pero me haces sentir tan seguro y amado.
Wang Yibo sonrió, esa sonrisa tierna que hacía que el corazón de Xiao Zhan se derritiera un poco cada vez. -Es lo único que quiero, Zhan. Que te sientas seguro y amado. Lo demás lo descubriremos juntos.
Ambos se quedaron en silencio durante un rato, simplemente disfrutando de la presencia del otro. Pero Xiao Zhan sentía una pregunta en su mente, algo que había estado rondando desde la noche anterior, y finalmente decidió que era el momento de hablar.
-Yibo, comenzó Xiao Zhan, vacilante, quiero preguntarte algo. Anoche, cuando estábamos en el estudio... había un momento en el que sentí como si estuvieras guardando algo. No estoy seguro de qué, pero... ¿estás bien? ¿Hay algo de lo que quieras hablar?
Wang Yibo frunció ligeramente el ceño, claramente sorprendido por la pregunta. Se sentó en la cama, mirando a Xiao Zhan con una expresión reflexiva. -No es que esté guardando algo, Zhan, pero... hizo una pausa, buscando las palabras adecuadas. Creo que hay una parte de mí que sigue preocupada por si estoy yendo demasiado rápido, o si te estoy empujando a algo para lo que no estás preparado.
Xiao Zhan negó con la cabeza. -No, no lo creo y si en algún momento sintiera que no puedo seguir, te lo diría. Confío en ti, Yibo y en lo que estamos construyendo. Pero también quiero que confíes en mí, que me digas si hay algo que te preocupa o que sientes que no estamos abordando.
Wang Yibo asintió lentamente, procesando las palabras de Xiao Zhan. -Tienes razón. Hay algo que he estado pensando, algo que no hemos explorado todavía. Pero he dudado en mencionarlo porque no quiero que sientas que te estoy presionando.
Xiao Zhan se sentó más cerca de Wang Yibo, tomando su mano y apretándola con suavidad. -Dime, Yibo. Quiero saberlo.
Wang Yibo tomó una respiración profunda antes de hablar. -He estado pensando en... en la dominación y sumisión, más allá de lo que hemos hecho hasta ahora. Quiero saber cómo te sientes al respecto. No estoy sugiriendo que lo hagamos de inmediato, pero es algo que me gustaría explorar eventualmente, si tú también estás de acuerdo.
Xiao Zhan sintió un ligero nudo en el estómago al escuchar esas palabras, pero no era miedo, sino más bien una mezcla de curiosidad y emoción. Había leído sobre ello, sabía lo que implicaba en teoría, pero ahora que Wang Yibo lo mencionaba, el concepto parecía mucho más real, mucho más personal.
-Yibo, dijo Xiao Zhan lentamente, eligiendo sus palabras con cuidado, no voy a mentirte, la idea me asusta un poco. Pero también... me intriga. Creo que, con el tiempo, y si lo hacemos con cuidado, podría estar dispuesto a explorar eso contigo.
Wang Yibo lo miró con una mezcla de alivio y respeto. -No tienes que decidir nada ahora, Zhan. Lo que mas me importa es que hablemos de ello, que seamos honestos el uno con el otro sobre nuestros deseos y límites. Esto es algo que sólo quiero hacer si ambos estamos completamente de acuerdo.
Xiao Zhan asintió, sintiendo que el peso en su pecho se aligeraba. -Gracias por ser tan considerado, Yibo. Me alegra que hayamos hablado de esto. Y sí, creo que eventualmente podríamos explorar esa parte de nuestra relación. Pero como dijiste, con cuidado, y asegurándonos de que ambos estemos listos.
La conversación los dejó con una sensación de paz y comprensión. Sabían que estaban entrando en un nuevo territorio, pero también sabían que lo estaban haciendo juntos, con comunicación y respeto mutuo. El resto del día pasó en un ambiente tranquilo y reflexivo. Xiao Zhan y Wang Yibo pasaron tiempo juntos, disfrutando de la compañía del otro sin la presión de las expectativas. Hablaron de cosas triviales, compartieron risas, y por momentos, simplemente disfrutaron de la presencia del otro en silencio.
Esa noche, cuando se preparaban para dormir, Xiao Zhan se acercó a Wang Yibo y lo abrazó con fuerza. -Gracias por ser tú, Yibo. Gracias por siempre estar a mi lado, sin importar lo que enfrentemos.
Wang Yibo correspondió el abrazo, susurrando en el oído de Xiao Zhan. -Siempre estaré aquí para ti, Zhan. Siempre.
Con esas palabras, ambos sedejaron caer en el sueño, sabiendo que lo que estaban construyendo era fuerte,basado en la confianza, el amor y la disposición de enfrentar cualquier cosajuntos.
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Amándote
RomanceDos personas completamente distintas se encuentran, pero la atracción que sienten el uno por el otro es innegable.... Podrán adaptarse el uno al otro....