En el año 3138, el planeta ha sido arrasado por un conflicto devastador. Lo que alguna vez fue un mundo vibrante se ha convertido en un desierto desolado, donde las máquinas, lideradas por Progenta, (una inteligencia artificial que fue humano) domin...
Localización: En la ciudad adentro de "Kazeyama no Shita" (風山の下) - 'Bajo la montaña del viento'
Punto de vista: Haruki
Nombre de la ciudad actual: Kageronai (影呑ない) -
Año: 3138 Día: 1/12/38 Hora: 6:12 am ______________________
"Aunque su sonrisa era un destello en mi oscuridad, sabía que su luz no era de este mundo... que, como una llama atrapada en un cristal frágil, algo dentro de ella ardía con la certeza de su propio final. Amar a alguien tan efímero, tan inevitablemente condenado, era como aferrarse al filo de un sueño que sólo podía desgarrarme."
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Han pasado dos días desde que Kiyomi nos dio ese pequeño respiro, una oportunidad para explorar Kazeyama no Shita dentro de Kageronai. Fue un alivio poder recorrer la ciudad, aunque fuera por poco tiempo, y ver un poco de la vida fuera del refugio que tenemos ahora, una casa bastante acogedora. Pero hoy volvimos a lo esencial: la misión. Kiyomi nos había mencionado algo sobre las provisiones, y sabíamos que era algo importante, aunque los detalles no estaban del todo claros.
Era temprano por la mañana, y Ryōko y yo estábamos sentados en el refugio, discutiendo los planes. Ella estaba sentada en una silla frente a la cama, mientras yo, todavía con algo de sueño, intentaba seguirle el ritmo desde mi lugar en la cama. Siendo semi-robótica o algo así, Ryōko no necesitaba tanto descanso como yo, así que ya estaba despierta y concentrada en el plan desde antes que yo abriera los ojos.
Intenté hacer mis aportes, aunque tímidamente. A veces tenía ideas, pero no siempre estaba seguro de si eran realmente útiles, y cada vez que abría la boca sentía que mis palabras eran como un susurro al lado de la claridad de Ryōko. Ella parecía saber siempre lo que hacía, y la mayoría de las veces era quien llevaba la conversación, aportando la mayoría de los detalles del plan. Pero hoy... hoy se veía diferente.
Mientras ambos discutíamos el plan, la luz de la mañana apenas se filtraba por la ventana del refugio. Yo estaba sentado en la cama, tratando de concentrarme, pero mi mente seguía un poco adormecida. Ryōko, sentada frente a mí, repasaba cada punto con precisión. A veces, sentía que apenas entendía todo lo que decía; su forma de pensar parecía ir varios pasos adelante.
(Ryōko): Entonces, Haruki, la misión consiste en recuperar las provisiones en el almacén del distrito oeste... <comenzó señalando un mapa desgastado sobre la mesa.> Pero tendremos que pasar por las patrullas de seguridad en esta zona <apuntó un área en particular.> y eso complica las cosas.
