One shots de PP

Reencarnación: Cazando a la conejita.

Dos semanas después

Sabrina Lewis

Me encuentro en mi habitación tirada en mi cama mientras lágrimas rebeldes salen por mis ojos.

Hoy sería nuestro aniversario y cumpliríamos 3 años juntos.

Suelto un sollozó y me cubro los ojos con mis manos.

¿Fui un obstáculo en el camino de Christopher? ¿No valgo la pena para que me deje así sin más?

¿Para él es más importante el poder que yo?

Mis lágrimas salen sin parar y trato de callar mis solozos.

Él no me eligió, prefirió el poder antes que a mí.

Me prometió volver a mi lado pero me dejó.

Escuchó un golpe en la puerta de mi habitación, me limpió las lágrimas y me levantó para abrir la puerta.

Abro pensando que es Bratt y me lanzo a sus brazos.

Él me corresponde y me rodea con sus brazos, abro los ojos cuando huelo un perfume varonil diferente al de Bratt.

Miró hacia arriba y me encuentro con esos ojos marrones que me miran preocupados y con intensidad.

Parker lleva su mano a mi mejilla y limpia mis lágrimas con su pulgar, cierro los ojos ante su acción.

Suelto un suspiro y abro los ojos, no puedo evitar que caigan lágrimas de mis ojos.

Me escondo en su pecho y él me abraza mientras deja caricias en mi cabello.

Lloro en su pecho.

Me tardó unos minutos en tranquilizarme y me intentó separar pero Parker me vuelve a presionar hacia él.

— Tranquila, puedes refugiarte en mis brazos tanto como quieras —me susurra en mi oído.

Mis ojos se cristalizan y lo abrazo fuerte.

Diez minutos después

Me separó del abrazo y él eleva mi mentón para que lo mire.

Sus ojos marrones me miran tan intensos que no puedo evitar el sonrojo en mi rostro.

Él me regala una sonrisa.

— G-gracias, Dominic —le susurró con una pequeña sonrisa.

Veo cómo le brillan sus ojos al llamarlo por su nombre.

— No fue nada conejita —me susurra cerca de mis labios y deja un beso en mi mejilla.

Se separa.

— Oh, quieres pasar —le digo al ver que todo esté tiempo estuvimos entre el pasillo y la habitación.

— ¿Puedo pasar? —me pregunta.