En donde la familia Parker se muda a China por el trabajo de Cherry, dejando descontentos a los hermanos con esta noticia. Creyendo que su vida en ese lugar sería un infierno.
O; donde Gina se entromete en una pelear en el parque para defender a su...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Pov Gina.
Durante la clase todo transcurrió normal. Digo, me tocó en el mismo salón que Tomas, algunos profesores fueron pacientes conmigo debido a que en Detroit nunca vi estos temas que ellos ahora me explican muy detalladamente, además de que el Chino no logró dominarlo, aun. Aunque en geometría obtuve un 10. Pero no todo fue color de rosa, ya que algunos no disimulaba para nada las miradas juzgonas que me daban o el hecho de que hablaban de mí a mis espaldas sin disimular que lo hacían. Intente con todas mis fuerzas de ignorar a los imbeciles que por lo visto nunca se cruzaron un negro en toda su asquerosa vida, pero es que los mormullos se volvian dificles de no oirlos, igualmente algunos profesores me hacian preguntas que me incomodaban.
Así que pedí permiso para ir al baño. Tom me preguntó si quería que me acompañara, pero me negué, no quiero meterlo en problemas por si me atrapan deambulando por la escuela. Por que si, no me estoy dirigiendo al baño sino al aula donde la melodía de un piano me atrajo como si fuera un imán. No tuve el coraje de ingresar porque al asomarme vi que un profesor se encontraba corrigiendo a una estudiante, que tiene una expresión de enojada y al parecer harta.
—Es increíble que cometas tantos errores. ¿Qué te pasa? Últimamente estás muy distraída, y por más que te corrija cuantas veces, sigues cometiendo el error una y otra vez— la reprende el profesor. —Responde Mei.
La mencionada voltea a verlo con una mirada tan profunda e intimidante que me hace sentir pequeña, como si estuviera en el punto de mira de un rifle.
—Me disculpo por equivocarme profesor, pero, en mi defensa se supone que yo tocara el violín en la presentación. Y resulta que Mei Ying lo hará. — replica enfadada
—Li mei voy a ser franco contigo. No eres buena con el violín, eres prácticamente un desastre, eso no es lo tuyo. Hasta tus padres lo reconocen, por eso me pidieron que te ayudará a manejar el piano.
Auch. Hasta a mi me dolió eso, y eso que yo no sé tocar ningún instrumento. Pero, espera dijo Li mei, es la amiga de Mei ying. No aparenta ser lo que dijo ella, yo la veo como controladora, perfeccionista y pareciera ser algo egocéntrica. Aunque bueno, no voy a juzgarla tan pronto, a lo mejor no es lo que aparenta ser.
—Oye — habla alguien a mi lado, asustandome.
Me llevo la mano al pecho por el susto. Una chica un poco más alta que yo, de cabello castaño y tez no tan clara como los paliduchos de aquí. Es extranjera.
—¿Asustas así a todo el mundo o que te pasa? — pregunto un poco más relajada, pero con las defensas en alerta.
—¿Y tu eres una acosadora que espía por curiosidad u obsesión? — pregunta divertida
—No espió a nadie, solo iba al baño pero me distraje con la melodía del piano. Es todo, y ¿tú qué haces aquí? No se supone que deberías estar en clases.
—Bueno me pasa lo mismo que a ti, también iba al baño pero tu me llamaste la atención. — frunzo el ceño ante esa confesión tan lesbiana.
—En el buen sentido no seas mal pensada, es solo que hace mucho no me cruzaba con alguien extranjero. Estar rodeada de tantos asiáticos come bichos me hacía sentir fuera de lugar, además que onda con la comida de aquí, un asco total.
Ella hablaba conmigo como si fuéramos amigas de hace tiempo, aunque debo confesar que me gusta esa confianza y naturalidad que tiene en dar charla.
—Okey chica, ya me has dejado claro que no te gusta para nada la comida de aquí.— extiendo mi mano para presentarme. —Soy gina y vengo de Detroit
