Capítulo 15

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"Es una historia muy interesante, muchas gracias por contarla" Agradeció Sir Pentius comenzaba a sentirse algo incómodo por si Zestial de verdad lo dejaría ir como si nada.

"Por cosas como esas ellos han estado en mi punto de interés durante mucho tiempo, y, para que todo salga como he planeado, necesitaba compartir su origen con alguien tan estúpido como tú, aunque realmente no acertaste la prueba" Declaró Zestial, haciendo que Sir Pentius quede en shock.

"¿Entonces no eres Caín?" Sir Pentius se sintió estúpido cuando vio al overlord negar con la cabeza.

"No, pero sí que me gusta su historia, por ese interés es que habrás deducido erróneamente eso" Aclaró Zestial mientras señalaba varias cosas en su casa relacionadas con el relato de de Caín y Abel.

"¿Entonces quién eres en realidad?" Sir Pentius se arrepintió al instante de haber hecho esa pregunta, pues el ambiente se tornó muy tenso, pero al escuchar a Zestial reírse, el pecador serpiente se relajó un poco mientras suspiraba.

"Solo te diré que fui un rey que acabó aquí por hacer lo mejor para su pueblo" Habló Zestial mientras bebía de su taza de té, llenando de más curiosidad a Sir Pentius, pero decidió no insistir más.

"Y ahora, solo queda decirte que no permitiré que los Vees consigan acero angelical sin luchar antes por él, con eso dicho, tienes 10 segundos para que tú y tus esbirros salgan de mi casa" Declaró Zestial, haciendo que Sir Pentius asienta mienteras comenzaba a arrastrarse rápidamente hacia la salida seguido por sus huevos secuaces. Aunque, aún con toda la información sobre los Vees que ahora conocía, se sentía derrotado, pues no había conseguido su objetivo.

Pero, en cuanto Sir Pentius se fue, Zestial sintió que una sombra entraba en su casa, sonriendo mientras levantaba una ceja con interés. "No esperaba que me hicieras una visita, ¿Te gustó a ti también la historia que le conté a ese pecador? Sé que has estado observando todo este tiempo" Habló Zestial a la aparente nada, hasta que una sombra se convirtió en algo sólido, en un overlord temido con características de cabra y voz extravagante, Alastor.

"Bueno, sentí interés cuando te vi acompañado de un pecador y os seguí, que puedo decir, me encantan las exclusivas" Habló Alastor, mirando fijamente a Zestial, quien entrecerró los ojos mientras esperaba que Alastor continuara hablando y dijera el verdadero motivo de haber hecho acto de presencia.

"De hecho, creo que he adivinado quién eras en la otra vida" Declaró Alastor, sorprendiendo a Zestial, quién siguió sin contestar y simplemente escuchó su respuesta.

"Mi intuición dice que eras el rey Manases, ¿O me equivoco?" Fue la respuesta del demonio radio, dejando a Zestial en silencio durante varios segundos.

"No te lo confirmaré, Alastor" Respondió Zestial mientras continuaba hablando.

"Si has escuchado significa que estás interesado en esos tres pecadores, ¿O acaso quieres acabar con ellos?" Preguntó Zestial, recibiendo una respuesta perspicaz de Alastor.

"Igual que tú tienes planes, yo también, y estoy esperando el mejor momento para actuar, también quiero decirte que, si nuestros planes chocan, no dudaré en pedir y ganar la revancha" Dijo Alastor con su característica sonrisa y una voz desafiante para, instantes después, desaparecer, haciendo que Zestial suspire.

"Siempre has sido un enigma" Fue lo único que dijo mientras se tranquilizaba y relajaba mientras continuaba bebiendo todo el té que posee en su casa.

"Los Vees son muy importantes en este plan, no permitiré que te interpongas, demonio radio" Zestial rompió su taza mientras fruncía el ceño, se aseguraría de que todo salga según sus predicciones y planes.

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