En cada tormenta y películas.

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Ya habían pasado los meses desde que Lan Zhan entabló una relación con XuanYu y Wei Ying estaba más tranquilo con su mente y sus sentimientos. Decidió no estar más triste, se convenció que algo mejor vendría para él hasta que realmente se lo creyó y así, su estado de ánimo pudo mejorar.

Era un fin de semana de tres días, la familia Wei Jiang se fueron de viaje a una casa de campo ubicada frente a un lago.

Wei Ying y Jiang Cheng juegan y nadaban en el agua como si fueran dos pecesitos, los jóvenes se encontraban en su elemento.

Aaaaaaaa'cheng, juguemos a ver quién aguanta más tiempo la respiración bajo el agua -  Jiang Cheng, aunque sea sólo un juego, todo lo que propone su hermano mayor lo toma como un reto y no puede siempre evitar, aceptar.

Competir contra Wei Ying es el talón de Aquiles del menor, y no aprovecharse de eso para su diversión, sería un desperdicio que el mayor no está dispuesto a dejar pasar si se le presenta la ocasión.

A la cuenta de tres los hermanos se estaban preparando para el reto. Jiang Cheng fue veloz al sumergirse de los primeros, aguanto la respiración bajo el agua lo más que pudo y cuando emergió se encontró con que Wei Ying lo miraba con una sonrisa traviesa. Comprendiendo lo que había pasado, el menor se enojo.

Wei Ying - grita - te voy a partir la madre - el menor rodeó el cuello del mayor con su brazo y con su puño le rasco la cabeza.

Ya, ya, era una broma, no te enojes - carcajea Wei Ying - es divertido ver cómo caes en mis trampas.

Bueno, la broma era simple: Jiang Cheng se sumergía y aguantaba la respiración, mientras que Wei Ying no lo hacía y se quedaba viendo, aguantando la risa, en lo que Jiang Cheng hacía el tonto.

Jiang Cheng  hace una barrida a los pies de su hermano para que caiga de espaldas y se sumerja. Wei Ying sale y se monta sobre la espalda del menor, haciendo fuerza para también irse de espaldas y arrastrar a su hermano con él bajo el agua.

Me alegra ver cómo nuestros hijos han crecido - sonríe FengMian viendo a los adolescentes jugar en la laguna desde la ventana de la cocina.

Se llevan bien - ChangZe se acerca con una tasa de té y se la ofrece a su esposo - A'cheng es más maduro que A'ying, mientras que él es el infantil. Se complementa, por eso se llevan bien - besa la frente de FengMian y lo rodea con sus brazos.

Está primavera es inestable - FengMian analiza las oscuras nubes que se están acercando.

Cariño, esto es a lo que llamamos cambio climático - ChangZe se aparta - encendere la calefacción para que esos críos no pasen frío cuando entren.

Ve, yo terminaré de cocinar - dice FengMian dándole una nalgada a su esposo haciéndolo sobresaltar por el repentino ataque.

Yo te ayudo padre a terminar - llega YanLi ofreciendo.

A eso de las 16 horas, había empezado a llover. En la sala hay un ventanal que abarca toda la pared, despejado de cortinas. Pueden ver cómo la lluvia cae y rebota sobre el lago, y los árboles se mueven por la fuerza del viento.

Sentados en el suelo, Wei Ying y Jiang Cheng juegan ajedrez, muy concentrados.

YanLi, en un sillón metida en su computador, realiza un trabajo universitario.

FengMian y ChangZe estaban sentados en el sofá, bebiendo una copa de vino cada uno. Era un cuadro familiar acogedor.

Más tarde, esa noche, se había generado una tormenta, con truenos y relámpagos incluidos. Jiang Cheng estaba en su cuarto viendo “El planeta de los simios” del año 1968 cuando Wei Ying entra.

Paquete Familiar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora