—¡Que no! —al ver tu silencio, después de unos segundos volvió a decir. —Como sea, cuando estes lista, mándame a hablar, encadenaremos al tritón con unas cadenas más avanzadas que las anteriores, te juro que no se saldrá esta vez y tú podrás limpiar tranquilamente.
—¿Encadenar..?
—Pues si idiota, ¿o quieres que te arranque la cabeza como al otro?
Abriste tu boca ya molesta y lista para decirle que lo había mordido por culpa de ellos, por que se sintió amenazado, pero recordaste a ultimo momento que ya les habías dicho que él no hablaba, así que sería sospechoso...
—No...
—Entonces adiós, avísanos. –volvió a recordar, antes de darse la vuelta y empezar a caminar fuera de ahí.
Tú te le quedaste viendo, pero el sonido del agua moviéndose detrás tuyo hizo que voltearas, era Yoriichi, quien puso sus manos en el vidrio, y observó con curiosidad tu traje para adentrarse en el agua.
Después, alzó su cabeza hasta verte, con una mirada de curiosidad.
—Si, ya lo sé...—rascaste la nuca. –Quieren que limpie el acuario...pero que avise para que te encadenen.
Notaste que ante tus palabras el se alteró y retrocedió un poco, frunció el ceño, obviamente no le gustó para nada eso, tú solo suspiraste.
—Ni loco dejare que me encadenen. ¿No te das cuenta, Etsuko? Ellos te quieren matar. —se volvió a acercar al vidrio, en cambio tú ladeaste la cabeza viéndolo con confusión.
—¿A que te refieres? Yo...no creo que sea eso..
—Hasta ella te lo dijo, Etsuko. "Encadenaremos al tritón con unas cadenas mejores que las anteriores"
Vamos, tú no eres idiota, hazme creer que no, significa que ellos quieren ver si puedo resistirlas, y te quieren usar a ti de presa. —comentó. —Y si morías, fácil. "Cuidadora de animales marinos muere al caer al acuario y ahogarse" lo harían ver como un accidente.—.......—solo lo mirabas, procesando sus palabras, el se cruzó de brazos y se dio la vuelta al ver que no le ibas a creer.
—Como tú quieras. –nado fuera de ahí, lo único que viste fue su aleta desaparecer entre unas grandes rocas.
—¿Yoriichi...? —lo llamaste, pero ya nadie respondió, entonces suspiraste, tirando tu traje de agua al suelo.
[••••]
Un chico encargado del laboratorio entró a la habitación donde se encontraba el acuario con las cadenas, si, esas que según servirían para que esta vez la criatura marina no se escapara.
Hablando de dicha criatura, él observaba todo desde el acuario, desagradado, y más cuando te vio a ti acercarte.
—Deja que un experto se haga cargo. –mencionó, para después mirar al chico, quien te miró y tú solo le mostraste tu mano con varios billetes.
El joven tardó mucho, mucho en entender lo que querías pero cuando entendió solo asintió, y tú sonreíste hasta que notaste que la señora encargada se acercó a él, entregándole las cadenas.
—Te toca.
–Por supuesto. —las tomó y se dirigió a las escaleras que guiaban para entrar al acuario.
Cabía recalcar que él ya tenía el traje adecuado para entrar, y con cuidado, lo hizo, sus compañeros ya tenían capturado al tritón en una máquina debajo del agua, cosa que le facilitaría encadenarlo, se acercó, con cuidado.
Sin embargo, Yoriichi le gruñó, enseñando sus dientes afilados como si lo estuviera amenazando, el chico levantó sus manos, como dándole a entender que no quería dañarlo pero obvio que el tritón no se la creía.
ESTÁS LEYENDO
Experimento acuático | Yoriichi Tsugikuni
RomanceLa vida de Etsuko Akinori va mejorando bastante cuando la contratan en el mejor laboratorio de todo Japón. No podía desear más, tenía buena encomia, unos padres que la amaban, buena casa y el mejor trabajo pagado de todos. Pero, toda su vida da vuel...