— j_mes_10CarolRissely Gracias por comentar y darme una razón para hacer un OS de este hombre.
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O22. Bikini . . . !!
« — I don't gotta be the one, no. I just wanna be one of your girl tonight. »
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O m n i s c i e n t e.
COMPLETA CONCENTRACIÓN EN LA PANTALONES DELANTE de ella. Así era como se mantenía Caroline. Desde que había llegado a la enorme casa no había despegado su vista de la pantalla plana apagada, sus pensamientos rodando a una sola desición.
¿Lo haría o no lo haría?
Si algo fallaba en lo que se que estuviera pensado todo el plan se irá al carajo. Y no solo su amistad con Katherina sino también su dignidad. La familia de sus amiga le había abierto las puertas de su casa y ella que hacia, se colaba por el padre de su mejor amiga.
Caroline no se dió cuenta en qué momento había comenzado a fantasear con el padre de su mejor amiga, no sabía en qué momento comenzó a ver detalladamente cada movimiento que hacia.
Robert le pareció sumamente guapo, se mantenía en forma pero sin duda lo que más le encantaba eran sus ojos, de ese color azul tan brillante que le hacía estremecer a cada mirada que le daba. Y cada que lo hacía sentía como sus piernas temblaban.
— ¿Acaso me estás escuchando? — Katherina hablo con confusión.
— Si lo siento, solo me distraje.
— ¿Mirando el televisor?
— Ajá.
— Muy bien, te contaba sobre que me gustaría que pasarás la noche conmigo, ya sabes, por mi cumpleaños.
Hoy era el cumpleaños de Katie, como la llamaba Caroline, y era justo por eso que le daba tanta angustia hacer lo que tenía en mente justo hoy. Si algo salía mal ella y solo ella sería la causante de arruinar el cumpleaños de la única persona que había estado con Caroline toda su vida.
— Claro, eso estaría bien — metió sus manos entre sus piernas con una postura nerviosa.
— Pues le diré a mamá y a papá.
Asintió y volvió su atención a la televisión. Parecía que solo eso podía mirar.
De repente, Anna entro por la puerta con aquella sonrisa que la hacía querer lanzarse sobre ella, odiaba cada vez que lo besaba y le restregaba de manera inconsciente como ella si podía y Caroline no.
— Hola chicas, ¿listas para la alberca? — su voz taladro sus oídos como si de una tortura se tratara. Sonrió con falsedad y asintió, Katherina y Caroline subieron a su habitación en busca de lo trajes de baño.
