Viviendo con Fresitas.

3."Creo que un fantasma se mudó aquí.."

QUIÉN ES ESTE GUAPO ESPÉCIMEN Y PORQUÉ ME ESTÁ HABLANDO? No soy invisible al menos...

PAREN TODO! porqué dice "no sabes lo que te espera"?

— Porqué dices eso, Nathan? -digo curiosa a lo que él vuelve a sonreír de lado.

— Ya verás... -dice, esperando a que conteste con mi nombre.. pero una voz chillona me hace sobresaltar.

— NAAAATHAAANNNN -grita una chica.. la cual rápidamente aparece por la puerta de la cocina.

Su cabello era rubio... miel mejor dicho... y sus ojos eran celestes, levantó una ceja fulminándome con la mirada y después relajó su cara.

— Oh ya se quien eres.. -sonrío arrogante.- eres Liz, la nueva que dijo Jennifer -se acercó y tomó la mano de Nathan, poniendola en su cadera.- Soy Stefannie Evans. -sonrió.

Le sonreí igualmente.. Nathan habló.

— Tengo que irme Stef... -dice intentando evitar el momento incomodo.-

— Ay, bueno cariño, pero primero...  -dice para después tomar a Nathan del mentón y atraerlo a ella, juntando sus bocas.

Sin saber que hacer, serví agua en un vaso y lo bebía mientras ellos se comían lentamente. Al pasar unos minutos, cuando se quedaron sin aire, Stefannie le sonrío, Nathan rodeó los ojos y salió. 

— Recuerda pequeña, es mío. -dice Stefannie, mirándome. Yo solo asentí.- Adiós. -dijo para después retirarse de la cocina.

Loca... 

Dejé el vaso sobre la mesada y fui hasta las escaleras, al subirlas me encontré con otra rubia... que estaba pensativa delante de mi cuarto, que tenía la puerta abierta.

— Qué haces? -digo poniéndome junto a ella.

— Creo que un fantasma se mudó aquí.. -murmura aún con su mirada pensativa y su ceño fruncido, reí.

— No, yo me mudé -ella me miró y me sonrío.- Soy Lizzie Brooks, puedes llamarme Liz. -me presento amablemente.

— Yo soy Tiffany Wood -dice sonriente, estirando su mano sonriente y dejando ver sus claros ojos y su cabello color dorado con tonos oscuros por encima.- Puedes llamarme Tiff o Tiffany.. como te guste.. la verdad todos me dicen pequeña o Wood.... cosas así.. no lo sé... -ríe de manera extraña y mueve sus manos de un lado a otro rápidamente.

— Está bien Tiff -reí.- Oye, estoy cansada.. me dejas pasar? -ella miró al piso y luego me miró a mi sonriente y se corrió.

— Perdona, no me había dado cuenta -ríe y hace raros gestos con sus manos.- Hasta pronto Liz -dice yéndose a otro cuarto.

La chica parecía bastante... como decirlo... no inteligente. Vieron la típica rubia no inteligente? Bueno, esa exactamente era ella. Entré en mi cuarto y cerré la puerta. Tomé mi teléfono de mi bolso y marqué el numero de mamá, tenía que avisarle que llegué y que ya estoy en una residencia.

[ . . . ]

El día estaba anocheciendo, mañana era domingo, tendría que salir a algún lado para poder conocer gente. Si, la forever alone sin amigos volvió y esta vez en California wooho. 
Golpearon a mi puerta rápidamente mientras estaba con mi laptop. Cerré la laptop y la dejé a un costado, me paré de la cama y caminé a la puerta para abrirla, no había nadie afuera de esta. ¿Enserio? aún en una residencia me hacen bromas? Pf, infantiles. Me di vuelta y entré, cerrando la puerta y volviendo a recostarme en la cama. No tenía ganas de tomar la laptop nuevamente