Después de su última relación fallida, Gala se niega a volver a amar, cuando vuelve a hacerlo, se enamora de la peor persona, su futura madrastra. Una historia de acciones y consecuencias.
;Gala top (G!P).
;Karime bottom.
—Anda cariño, pasa. Creo que Gala está con su amiga, tenemos la casa sola. —Dijo Damián, tratando de convencer a Karime para quedarse un poco más con ella.—
Karime quería rechazar esa invitación, no quería quedarse sola con él, se sentía incomoda debido al comportamiento que tomo Damián con ella además de que su cuello estaba en un mal estado. Llegaba a sobrepasarse un poco más y su relación se arruinaría.
—No Damián, gracias. Seguramente Gala no tarda en llegar y no quiero incomodarla, recuerda que ni siquiera ha querido hablar conmigo así que nos vemos otro día, ¿te parece? —Trató de declinar la invitación de la manera más amable que encontró.—
Damián rascó su nuca, estaba algo molesto debido a que no comprendía el comportamiento de Karime con él, hace unas semanas no podían ni separarse un momento, antes de que ella conociera a Gala.
—Te llamaré después. —Se despidió de manera cortante, después de estar insistiendo por estar cerca de ella ahora ni siquiera la miró antes de despedirse, cerró la puerta y aventó las llaves sin ver a dónde—. Maldita sea.
Su día fue malo y todo comenzó desde ayer, las palabras de Gala seguían haciendo eco en su cabeza, encima con lo de Karime sentía que todo el mundo estaba en contra de él, todo lo que amaba lo arruinaba y no sabía que hacer.
Se había acostumbrado tanto a ese estilo de vida apresurado, en dónde trabajar es lo mejor que sabía hacer hasta que nació su hija, Gala. Cuando la cargó sintió un amor inmenso junto a una gran responsabilidad que le causó miedo.
Tendría que abandonar su estilo de vida por su hija pero no quería, aún tenía mucho por hacer en su vida. A pesar de que la relación con su esposa cada vez se deterioraba más por la poca atención que le ponía tanto a ella como a Gala no quería separarse.
Estaba con ella porque veía una manera de librarse de la responsabilidad que tenía con Gala, la de ser padre. Esa era la única razón por la que estuvo tantos años en ese matrimonio incluso cuando ya no había amor por parte de Damián, definitivamente no estaba listo para ser padre.
Ahora que la responsabilidad era solo de él no sabía cómo entablar una conversación o incluso para tiempo con Gala sin hablar de sus proyectos en la empresa, tratos con inversionistas o algo relacionado con su trabajo.
Se consideraba un mal padre pero a pesar de querer cambiar no podía, se sentía atado.
En la relación que tiene con Karime también se siente atado, en un compromiso que no quiere tener por el hecho de no saber cómo continuar sin Isabella, la madre de Gala.
No podría decir que amaba a Karime pero tampoco podía estar sin ella, la necesitaba de manera emocional, necesitaba de su ayuda para continuar avanzando su relación con su hija. Era un poco hombre y lo sabía bien, utilizar a otras personas para continuar con un asunto que ahora solo era de él.
Tener que utilizar a Karime solo para tratar de continuar la crianza que Isabella tenía con Gala. Era un cobarde y un idiota, se odiaba por eso, se odiaba por ni siquiera poder sido un buen padre desde el incio.
Ahora se iría a dormir y mañana ir a, irónicamente, al lugar que le había robado todos los momentos importantes de su vida junto a su familia, a su trabajo.
Solamente pudo sonreír con amargura, era un maldito esclavo del destino que el había construido. Estaba cansado.
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