—¡Jame encárgate de esto!— Min miró al Padre de Hoseok llamando uno de los trabajadores.
—Yo puedo terminar aquí.— no tenía por qué hacer trabajo pesados, ni siquiera debió de haber entrado en el juego de sus cuñados, pero no lo había podido evitar, tenía dos grandes defectos, el orgullo y la competitividad.
—Lo se... Pero necesito tus habilidades en otra cosa, sígueme.— limpiándose las manos en sus pantalones siguió al hombre, cuando llegaron a una de las arcas de cría afuera ya estaba comenzando a llover.
—Ahí.— señaló su suegro, —Uno de mis capataces notó la falla en esa estructura, pero tuvo el mal juicio de no mencionarlo hasta ahora.— Min pudo ver el problema, una de las vigas estaba ladeada, la pared del fondo no se sostendría.
—Si la tormenta es tan fuerte como dicen, y dura varios días este granero no resistirá, tendrán que mover a las vacas
—Hijo, no son vacas, son novillos
—No sé nada de animales.— era la verdad, él no notaba la diferencia entre unos y otros, según el hermano mayor le había dicho que tenían diferentes criaderos de ganado ahí, eso no importaba, para él no dejaban de ser vacas y más vacas.
—Cierto, los animales no son lo tuyo, pero si las estructuras, ¿verdad?— Min asintió, subió a la parte superior para revisar mejor el daño.
—Tienes que reparar toda la estructura, si mueves esta parte, la otra de ahí se verá vulnerable, pero no hay tiempo ahora, provisionalmente, podríamos tratar de hacer un puenteo aquí con unos tablones de tres pulgadas, además podríamos reforzar esta zona con una prensa de hierro para mantener la firmeza de la viga y ...— al mirar el rostro de el señor Jung supo que no había entendido ni una palabra de lo que había dicho.
—¿Puedes arreglarlo?— preguntó su suegro, demandando un sí o un no.
—Será solo un arreglo provisional.
—Excelente, solo necesitamos sobrevivir a esta tormenta con el menor daño posible, ¿Qué necesitas hijo?— Min le dijo los materiales que necesitaba, poco después el Padre de Hoseok regresó con todo y un par de hombres más, trabajaron rápido y eficazmente, esta si era el área de él, no cargar leños, arrear vacas, cepillar caballos, las estructuras eran lo suyo y nadie era mejor que él en eso, ya casi terminaban cuando uno de los hermanos les llevó la comida, tomaron asiento donde pudieron y comenzaron a comer, fue toda una aventura, él que estaba acostumbrado a elegantes comidas, restaurantes caros, comidas gourmet, estaba sentado al estilo indio entre el heno comiendo emparedados de pavo y cerveza de botella, pero extrañamente, había sido una de sus mejores comidas, se encontraba realmente relajado en medio de estos hombres y le encantaba lo que estaban haciendo, estaba volviéndose loco sin duda, porque sentía la misma emoción ahora que tan solo estaba reparando un granero al que sentía cuando diseñaba un edificio lujoso.