𝒙𝒊𝒗. fallin' apart

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𝕮APITOLO  𝕼UATTORDICI    :fallin' apart    ♱

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𝕮APITOLO 𝕼UATTORDICI    :
fallin' apart ♱





TRAS HABER SIDO vista con él en varios lugares de París numerosas veces, la prensa americana comenzaba a sospechar de un nuevo romance de la modelo.

Seguía sin entender a ciencia cierta si la noticia que había leído varias semanas atrás sobre Nicholas era real. Aún así, no estaba dispuesta a guardarle luto al romance que tuvieron. Al fin y al cabo, estaba en París, la famosa ciudad del amor.

No iba a quedarse atrás, por lo que tras varios intentos y citas fallidas más tarde, quiso darle
una segunda oportunidad al actor del momento.

Habían pasado ya seis meses desde lo ocurrido.
Charlotte se había adaptado a París y se sentía más feliz que nunca. Haberle dado una oportunidad a Drew hizo que su vida diese
un giro por completo.

No volvió a saber nada más de Nicholas, de vez
en cuando aparecían mensajes en la pantalla de su teléfono, pero no le respondía. Sentía que lo mejor era no tener contacto por ese tiempo y que cada uno viviese su vida como pudiese.

— Buenos días preciosa. — el rubio acarició la oreja de la morena, poniendo un mechón detrás de ésta mientras la propiciaba pequeños besos por su cuello.

— Buenos días para ti también.

Continuó besando su cuello hasta llegar a sus labios. Charlotte soltaba pequeños gimoteos en señal de querer levantarse.

— Vamos, Drew. Tengo que ir al trabajo. La marca me está esperando para una sesión. — alentaba Charlotte.

— Cinco minutos más mami. — refunfuñaba.

Continuaron en la cama por no mucho más tiempo, dándose amor y pequeñas caricias, hasta que la morena tuvo que levantarse para arreglarse e irse a trabajar.

— Tu contrato termina este mismo mes. Con las ganancias que hemos obtenido gracias a la publicidad de tu imagen, hemos decidido pagarte por adelantado para que puedas disfrutar de la ciudad. Estamos muy contentos contigo, Charlotte. No dudaremos en volver a contactar con usted. — una de las trabajadoras del lugar sonreía a la morena mientras elevaba un cheque.

Charlotte se quedó sorprendida, aceptando el papel con gusto y sonriendo de vuelta. Al parecer, la agencia y la marca habían quedado encantados con ella y tuvo que terminar con su contrato antes de lo esperado.

Apenas la quedaban unos pocos días para volver a su ciudad natal y regresar a la que era su antigua vida como neoyorquina. Se había acostumbrado tanto a la ciudad parisina que se le había olvidado por completo las posibilidades de regresar a Nueva York.

Aquella misma tarde, después de una larga sesión de fotos y mucho trabajo, Charlotte volvía a su apartamento con notoria felicidad en su rostro.

Antes de abrir la puerta, escuchó unos sonidos extraños provenir al otro lado de ésta. Parecían gemidos, provenientes de una voz femenina.

Sacó sus llaves con rapidez, abriendo el portón
y encontrándose con una escena que la dejó boquiabierta.

— ¿Drew? — Charlotte dejó caer su chaqueta y su bolso al suelo, estática.

La imagen de su novio encima de otra mujer en su propio sofá sin ropa heló su sangre por completo.

— ¿Charlotte? — Drew paró de besar a la rubia para volverse hacia su pareja. — Pensaba que llegarías más tarde. — confesó.

— ¿Qué coño significa todo esto, Drew? — se acercó hacia el rubio y no dudó en propinarle una fuerte bofetada en su mejilla, haciendo resonar todo el apartamento.

— Puedo explicártelo, Charlotte.

La morena se dio media vuelta hacia la entrada y señalando ésta con una expresión furiosa.

— Sal ahora mismo de mi apartamento. Los dos. — señaló a la rubia.

— Char, por favor. — suplicaba Drew.

— No quiero volver a saber nada de ti. Salid ahora mismo de mi apartamento o llamaré a la policía.

Ambos se vistieron con rapidez y salieron por la puerta, cabizbajos por la vergüenza.

Drew se volteó hacia la morena. — Charlotte, por favor, déjame explicarlo.

— Vete a la mierda, Drew. — Charlotte cerró la puerta de un portazo, dejando al rubio con la palabra en la boca.

Se deslizó sobre ésta, tapando su rostro con ambas manos, con las mejillas hinchadas. Lágrimas amenazaban con salir y no pudo contener más la furia y la ira que sentía.

— Joder. — maldecía una y otra vez para sus adentros.

Aquello sería la gota que colmó el vaso. Sentía que su sitio en París ya no era más bienvenido.
Se levantó del suelo, se secó las lágrimas que caían por sus mejillas y, decidida, comenzó a empaquetar todas sus cosas y comprar un billete de avión para esa misma tarde.

Una vez en el aeropuerto, sacó el teléfono de su bolsillo y comenzó a borrar todas las fotos conjuntas con su actual ex pareja. En el fondo una espina asomaba en su corazón, sabía que no debía haberle dado una segunda oportunidad. Al fin y al cabo, ya experimentó varias situaciones parecidas con el rubio en el pasado, aún así, pensó que había cambiado pero, al parecer, seguía siendo el mismo idiota insensible de siempre escondido tras esa sonrisa encantadora.

De pronto, la imagen de una persona en concreto apareció en sus pensamientos. Sentada en la ventanilla del avión y admirando las nubes, se preguntaba por qué había tomado la estúpida decisión de mudarse a París, teniéndolo todo en Nueva York.

Aún así, no se arrepentía del todo de ello. Había conseguido mejorar su imagen y su carrera artística como modelo. Haber modelado y trabajado para una de sus marcas favoritas la llenaban de felicidad, a pesar de lo que había ocurrido poco tiempo atrás.

— Queridos pasajeros, estamos a punto de aterrizar en Nueva York. Manténganse con los cinturones abrochados mientras permanezca la señal encendida en todo momento. — la voz del piloto resonaba por todo el avión.

Tras llegar a su destino y con la cabeza envuelta en mil pensamientos, Charlotte caminaba hacia la puerta de salida, haciendo resonar sus tacones Louboutin por el aeropuerto.

Alzó la mirada hacia la puerta de salida. No podía creer lo que estaba viendo. Levantó las gafas de sol de Prada y las colocó sobre su cabello, sorprendida.

— ¿Nicholas?



[nota de autora] amo a drew pero tenía que terminar la relación de una manera u otra JSJSJ
al final ha aparecido nuestro protagonista hermanas, ¿qué sucederá a continuación? nos vemos en el siguiente capítulo, disfruten, un besazo!

UNHOLY       ♱         NICHOLAS CHÁVEZ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora