Habían pasado algunas noches desde el último mensaje, y aunque Jungwon intentaba seguir con su vida, las notas y la extraña presencia en la oscuridad seguían ocupando sus pensamientos. Todo el misterio alrededor de aquel observador sin rostro lo confundía, pero también le hacía sentir algo que no lograba comprender del todo. Cada vez que encontraba una nueva nota, la leía una y otra vez, preguntándose quién era el autor y por qué parecía conocerlo tan bien.
Mientras tanto, Ni-ki no dejaba de debatirse entre continuar su juego o alejarse definitivamente. La obsesión por Jungwon había comenzado como algo inexplicable, una curiosidad que crecía cada vez que lo observaba desde la distancia. Pero ahora, esa curiosidad se había convertido en algo mucho más profundo y peligroso. La conexión que sentía hacia él era intensa, casi dolorosa. Sin embargo, sabía que cualquier paso en falso podía hacer que lo descubriera, y eso era lo último que quería.
Aquella noche, Ni-ki se encontraba otra vez en su escondite bajo la ventana de Jungwon. Había llegado antes de lo habitual, con la esperanza de verlo aunque fuera por unos segundos, de sentir esa cercanía que solo la oscuridad le permitía. Desde el exterior, podía ver a Jungwon en su habitación, moviéndose de un lado a otro, como si estuviera buscando algo.
De repente, Ni-ki se dio cuenta de que Jungwon comenzaba a desabotonarse la camisa, preparándose para cambiarse de ropa. Ni-ki sintió un súbito calor en su rostro y apartó la mirada rápidamente, sin poder evitar que el corazón le latiera con fuerza. Sabía que no debería estar mirando, que había cruzado una línea. Pero, por alguna razón, sus ojos volvían a posarse en la figura de Jungwon, aunque intentara evitarlo.
Jungwon se quitó la camisa y la dejó caer sobre la cama, revelando su torso delgado y sus hombros definidos. Ni-ki sintió una mezcla de fascinación y culpa, pero sus pies se sentían pegados al suelo, incapaces de moverse. Sabía que debía irse, que aquello era un accidente y que no tenía derecho a estar ahí en ese momento, pero no podía apartar la vista. Jungwon era hermoso en su vulnerabilidad, y Ni-ki, atrapado en su propio dilema, no lograba mirar hacia otro lado.
Pero de repente, Jungwon giró hacia la ventana, y Ni-ki apenas tuvo tiempo de agacharse y esconderse en la sombra de un árbol. El corazón le latía con fuerza, y contuvo la respiración, temiendo que Jungwon lo hubiera visto. Desde su escondite, escuchó que Jungwon cerraba la ventana con un pequeño ruido de molestia. Ni-ki soltó un suspiro aliviado, aunque no podía evitar sentirse avergonzado por lo que acababa de hacer. Se había prometido no cruzar ciertos límites, y esta noche había fallado.
Esa misma noche, Ni-ki tomó una decisión impulsiva. Sacó su libreta y escribió una nota diferente, más honesta que las anteriores:
"Siento haber cruzado una línea que no debía. No era mi intención invadir tu privacidad. Solo… no puedo evitar querer estar cerca de ti. No estoy orgulloso de esto, pero necesito que sepas que no busco hacerte daño."
Dejó la nota bajo la ventana de Jungwon y se alejó rápidamente, sintiendo una mezcla de alivio y vergüenza. Era un paso arriesgado, pero algo en su interior le decía que debía ser sincero, aunque eso significara exponerse un poco más.
La mañana siguiente, Jungwon encontró la nota y se quedó en silencio mientras la leía. Las palabras lo desconcertaron. Había algo vulnerable y casi triste en el tono, como si quien fuera que lo estuviera observando realmente se arrepintiera. Jungwon no podía comprender del todo el motivo detrás de la disculpa, pero la sinceridad en las palabras le hizo sentir un extraño alivio. Aunque aún no sabía quién era su misterioso observador, una parte de él comenzó a sentir una conexión con él, como si de alguna manera entendiera las razones ocultas detrás de su presencia.
Esa noche, cuando llegó a casa, Jungwon tomó una decisión. Decidió dejar una nota bajo su propia ventana, una respuesta para su observador desconocido:
"No entiendo por qué haces esto, pero creo que lo que dices es sincero. No quiero vivir con miedo de ti. Si algún día quieres hablar, prefiero que lo hagas cara a cara. Quizás podamos entendernos."
Dobló la nota cuidadosamente y la dejó en el alféizar de la ventana, esperando que el desconocido la viera y, quizás, diera el primer paso hacia una revelación.
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⋆𐙚scream⋆𐙚 | Wonki
FanfictionWonki | ⋆𐙚Ghost face está obsesionado con jungwon⋆𐙚 ⋆𐙚 especial halloween ⋆𐙚 jw btt ⋆𐙚 nk tp ⋆𐙚