After the storm... #PromocionaTuNovela

Esperanza.

-Lisa. ¿Hiciste el relato de 50 Sombras de Grey*?

-Sí, Fátima. Ya lo hice.

Que cosas de la vida, cuando tenía 15 años esa novela fue una bomba literaria y llego a los cines pero nunca pensé que podía llegar tan lejos...

-No me pares tantas... ¿Cómo es que dices tu?- empezó a mirar a un punto lejano, buscando las palabras y me miro:- ... pelotas.

Nos quedamos mirando por segundos y acabamos en risas y carcajadas. Ella es Mexicana. Oh, debo contarles Fátima no es la única, somos más, han sido mis amigas ciberneticas desde hace ya 9 años, nos comunicamos por skype, en este momento hablo con las que más tengo apego Fátima. Joder. Soy mala con los nombres como había dicho. Su apellido es algo raro.

-¿Mi apellido es raro? - pregunto sorprendida y enojada. Pero estos años me he aprendido las muecas y cuando está triste o cuando me esta escondiendo algo, ella a los minutos sonrió. Ya sabía yo que parezco loca hablando en voz alta pero los que me quieren, me quieren así. -Tonta, el mes que viene creo que si iré para tu ciudad. ¿Te entusiasma?

-¿Bromeas? ¡Claro que si! Un abrazo psicológico para ti. - Vi rápidamente el reloj en la pared de mi cocina y me di cuenta que iba minutos tarde a la primera clase. Joder. Me despedí corriendo, no literal, y ella entendía, Fati me conoce. Agarre mi morral y salí disparada para la universidad

Llegue a la clase tarde pero estos profesores no dicen nada. Esta es la universidad, no están pendiente de ti porque su lema es: "Sí quiere estudiar, bien. Sino también"

- Lis.

Su voz era chillona. Su voz me perturbaba. Ella era Katie Monagan. Oh me acorde porque ella viene del infierno con satanás y sus perritos como bolitas de fuego.

-Solo te quería decir que veo a tu novio siempre, porque trabaja con mi prima Anahis...

Le interrumpí:-Esposo.

Ella rodó sus ojos. Y dejo de hablar, ¡Aleluya!

La clase finalizo minutos después. Me entere que era la única clase que íbamos a ver y pedí un taxi.

-Despierta, dormilona.

-Ryan, amor, llegaste.

Su dedo trazo mi cara y apretó suavemente mis cachetes. Me quedé dormida con toki y tachi en la cama y no me había dado cuenta. Pero Ryan tiene una camisa blanca con mangas sus botones hasta la mitad, su corbata estaba desecha y me miraba tierno. Joder. Él era el tierno.

-¿Por qué no me contaste que te despidieron de la radio? - pregunto enojado y con su ceño fruncido.

Baje la mirada. -Ryan. Disculpa. Estabas ocupado con los planos del nuevo centro comercial. Joder. Amor. Yo... era lo mejor

-En fin, quiero que sepas que no dirás más que somos esposos.

Mi respiración se dificultó, quede en silencio. No podía creer que me acaba de decir eso. Se levantó de la cama, se movió de un lado a otro y rascaba su cabeza. Sabia eso. Sabia que no quería decirme pero le tocaba: " -Lisa, mi jefe me pidió los papeles de matrimonio por tu culpa, porque dijiste que eramos esposos ahora dije que no, y quede como el malo.

Quede atónita. ¿Qué estaba ocurriendo? -Ryan. Es fácil pagar un notario, firmar papeles y casarnos...

Me interrumpió: -Lisa. No será así tan fácil... Tu siempre los ves fácil todo

-Y tu todo lo ves difícil. - grite enojada - Sólo no quieres casarte conmigo - aclare deprimida.

Él intento abrazarme, pero me aleje dolida como si su toque doliera..en este momento mis metas de casarme y tener hijos, no creo que sea con él, pero en mi otro yo pienso que esta un poco estresado y que no lo ha dicho para terminar. No, no, él me ama.