Es mejor ver cuando no hay luz.

9.-

-Aquella respiración que tocaba ligeramente su nuca comenzaba a ponerse aún más pesada. Su corazón ya no bombeaba con normalidad, ahora lo hacía con desesperación como ninguna.

-Don Josué sentía como la vida se le iba de las manos. Hasta que logra oír una voz que lo despierta. Era una voz gruesa, era una voz de temer. Aquella voz dada por el mismísimo diablo lo sometía aún más a su miedo.

"Pensé que ibas a dejarme a manos de la oscuridad como lo hiciste hace una semana."-Dijo aquello con su tono maligno.

-Don Josué solo siente su cuerpo estremecer y temblar sin cesar. Sus palabras se encontraban escondidas en sus adentros.

-Su temblar se intensificó cuando escucha que aquello detrás de él vuelve a musitar.

"Tuve mucho miedo esa noche. Los cuervos se posaban en los árboles del patio, y empezaban a cantar siniestramente. Sentí sus miradas helándome la piel, sentí que no había nadie para salvarme de entre las tinieblas."-Dijo en tono siniestro.

"Había esperado por ti aquella tarde, y cuando escuché que alguien había abierto esa puerta, pensé que habías sido tú, pero no fuiste tú, fue algo más, y me dejaste a solas con aquel."

-Solo el soplar del viento podía escucharse en ese momento. Nada más.